Aparece varado en Doniños el cadáver de una cría de tiburón peregrino de seis metros

Biólogos de la coordinadora CEMMA alertan de que llevan semanas atendiendo “cuatro o cinco” encallamientos de cetáceos al día

“Es rarísimo que pase en verano”, sostienen

La cría de tiburón peregrino apareció ayer por la mañana en la playa de Doniños / ecg

La cría de tiburón peregrino apareció ayer por la mañana en la playa de Doniños / ecg / SUSANA LÓPEZ CARBIA

El cadáver de una cría de tiburón peregrino de unos seis metros de largo apareció ayer varado en la playa de Doniños, en Ferrol, y permanece en una duna cercana, a la espera de ser recogido este miércoles por efectivos de Protección Civil y de la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (CEMMA), que lo trasladarán a Cerceda para ser incinerado. La aparición del ejemplar en el arenal, que estaba vivo en el momento de su encallamiento, causó una enorme sorpresa entre los bañistas que se encontraban en la zona.

El cadáver fue trasladado con una pala hasta una duna cercana / ecg

El cadáver fue trasladado con una pala hasta una duna cercana / ecg / SUSANA LÓPEZ CARBIA

Según confirmó el biólogo de CEMMA Alfredo López, se trata de una cría macho de ‘cetorhinus maximus’, el segundo pez más grande del mundo, después del tiburón ballena, que puede alcanzar los 10 metros de longitud y las cuatro toneladas de peso. “De momento, lo único que sabemos es que varó vivo y murió al poco tiempo”, señaló López. Los expertos de CEMMA no pudieron trasladarse ayer a Doniños por estar trabajando en otro encallamiento en la ría de Arousa. Y es que, según López, en las últimas semanas se están produciendo “entre cuatro y cinco varamientos de cetáceos al día”.

Es algo rarísimo en verano”, asegura el biólogo de CEMMA. “Estamos teniendo cuatro o cinco veces lo que vara normalmente en el mes dc agosto”, explica. El día de mayor actividad se produjo hace dos semanas, cuando, según López, tuvieron “22 cetáceos varados vivos en tres puntos diferentes, con una separación de 150 kilómetros entre sí”.

Ante el enorme volumen de trabajo al que están haciendo frente, los efectivos de CEMMA no han podido analizar aún la razón de que estén llegando tantos ejemplares a las playas. “No tenemos tiempo ni para sentarnos a reflexionar sobre lo que está pasando. Las razones pueden ser varias, pero ahora mismo lo único que podemos hacer es atender a los animales todos los días”, señala Alfredo López. Entre los cetáceos que están varando en las playas, “algunos llegan muertos y otros tienen señales de haber sido capturados”. También hay ejemplares enfermos, que si no curan terminan muriendo, mientras que otros se recuperan y pueden volver al mar.

A la espera de que pueda ser examinada por los biólogos de CEMMA, todo apunta a que la cría de tiburón, perteneciente a una especie poco frecuente, fue arrastrada hasta el arenal por el propio oleaje. En cuanto se dio aviso del encallamiento, efectivos de Protección Civil se desplazaron a la playa para proceder a retirar el cuerpo hasta una duna cercana. La actuación contó con la supervisión del alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, y la concejala de Seguridad, María del Carmen Pieltain.