La contraofensiva acelera su avance: las fuerzas ucranianas rebasan la línea principal de defensa de Rusia

La contraofensiva ucraniana acelera su avance. Tras romper el lunes la primera línea defensiva rusa en el frente de Zaporiyia (sureste) con la liberación de Robotine -ubicada en una de las rutas que conducen hasta el mar de Azov-, oficiales ucranianos aseguran que sus fuerzas han traspasado la línea principal de defensa fortificada de Rusia en el sur de Ucrania. Las fuerzas de Kiev combaten a las puertas de Verbove (región suroriental de Zaporiyia) tras conseguir notables avances estos últimos días. Ello significa que los ucranianos han perforado la línea Surovikin en ese sector del frente, donde el Kremlin ha desplegado unidades de paracaidistas -sus mejores tropas- para intentar frenar el avance enemigo.

En este nuevo capítulo de la contraofensiva, y tras un verano de pírricos avances, los ucranianos toman posiciones en enclaves estratégicos. La operación en Verbove busca ampliar la zona de ruptura de las líneas rusas para evitar que las tropas de Kiev puedan ser cercadas en su avance hacia el sureste. Verbove, junto a Novopokopivka, son los próximos objetivos ucranianos en la región de Zaporiyia, donde la contraofensiva de Kiev ha conseguido hasta el momento los avances más sustanciales.

Todo apunta a que el siguiente objetivo será la ciudad de Tokmak, un importante nudo de comunicaciones cuya liberación es clave para cortar el corredor terrestre que une la Rusia continental con la anexionada península de Crimea. Ucrania busca empujar hacia el sur a las fuerzas de ocupación rusas hasta llegar al mar de Azov, porque dejaría sin conexión terrestre con Rusia a las fuerzas rusas que controlan parte de las provincias de Zaporiyia y Jersón y la península de Crimea.

"Tokmak es un importante nudo ferroviario, un centro logístico ruso con líneas de comunicación. Es clave porque las fuerzas rusas dependen en gran medida de los trenes para moverse. Lo que pretenden los ucranianos es partir en dos el este y el sur llegando desde Zaporiyia al mar de Azov. También están redoblando sus ataques en Odesa", explica a EL CORREO Alberto Priego, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Pontificia Comillas-ICADE.

El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) confirmaba este miércoles que unidades de infantería ligera ucraniana, "probablemente efectivos de reconocimiento", se habían infiltrado al este de las fortificaciones rusas cerca de Verbove. "Imágenes geolocalizadas publicadas el 30 de agosto muestran a la infantería ucraniana en las afueras del noroeste de Verbove, lo que indica que el control ruso sobre las afueras del asentamiento está degradado. Las imágenes, sin embargo, no indican que las fuerzas ucranianas hayan establecido control sobre el área en ese momento", señalaba en su informe diario el ISW, que hace una semana advertía que las "segundas líneas de defensa rusas pueden estar significativamente menos defendidas".

"Las fuerzas rusas desplegadas en la dirección operativa más amplia de la región occidental de Zaporiyia se han estado defendiendo de las contraofensivas ucranianas desde el comienzo de la misma sin rotación. No parece que tengan unidades regulares no comprometidas en esta zona", afirmaba. Otros analistas coinciden: tras perder Robotine el Ejército ruso ha desplegado a sus últimas reservas de tropas aerotransportadas - la élite de su fuerza militar- para intentar frenar el avance de los ucranianos en Verbove y Novopokopivka.

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El Kremlin ha confirmado que los ucranianos combaten a las puertas de Verbove al asegurar que sus fuerzas han repelido en la última jornada cinco ataques de las tropas ucranianas cerca de la localidad. "En dirección a Zaporiyia, unidades del grupo de fuerzas rusas, ataques aéreos, fuego de artillería y vehículos lanzallamas repelieron cinco ataques de la 82ª Brigada de Asalto Aéreo de las Fuerzas Armadas de Ucrania cerca de la aldea de Verbove", señaló el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, teniente general Ígor Konashénkov.

Mientras, en el frente noroeste, donde Moscú acumula hasta 110.000 hombres para romper las líneas ucranianas, las fuerzas rusas mantienen la iniciativa. Konashénkov aseguró ayer que en el frente nororiental de Kupiansk la unidades rusas con apoyo de la aviación y la artillería "mejoraron su posiciones" en la primera línea. El portavoz del Ejército de Tierra de Ucrania Ilia Yevlash reconoció por su parte que en ese sector las tropas rusas utilizan grandes cantidades de munición a diario, además de toda su gama de recursos en artillería y aviación.