El efecto ‘antiaging’ de la ortodoncia y la cirugía ortognática

Los doctores Pérez Varela y Ferreras, de clínicas MAEX

Los doctores Pérez Varela y Ferreras, de clínicas MAEX / ECG

B. C. [Santiago]

Los dientes, al igual que el organismo, evolucionan y cambian a lo largo de toda la vida, por eso nuestra boca también muestra los signos de la edad. Mejorar la función y salud de la boca son los principales objetivos de un tratamiento de ortodoncia, pero la mayor parte de los pacientes reconoce que una de las principales motivaciones para someterse a una ortodoncia es conseguir una sonrisa más bonita. Lo que pocos saben es que, además, también pueden conseguirse algunas mejoras estéticas faciales cuando el paciente lo demanda.

Como explica el Doctor Juan Carlos Pérez Varela “con el paso del tiempo los dientes tienden a apiñarse, sobre todo los inferiores, y ese es uno de los motivos por los que en la actualidad muchos adultos se realizan un tratamiento de ortodoncia para volver a alinearlos. En unos casos por un motivo puramente estético, y en otros porque el apiñamiento dental es muy severo y les ocasiona problemas de mala oclusión”.

Aunque en general el momento idóneo para someterse a una ortodoncia es durante la etapa de crecimiento, actualmente la mayoría de los pacientes de las clínicas de ortodoncia son mayores.

Pérez Varela informa que “un tratamiento ortodóncico en manos de un buen especialista puede lograr un cierto efecto anti-edad corrigiendo algunos de los efectos del paso del tiempo: levantar la punta de la nariz, ganar soporte malar, darle mayor proyección al labio y aumentar levemente el grado de exposición de la encía”. Pero los mayores cambios en la apariencia del rostro no se consiguen solo mediante ortodoncia, porque en un paciente adulto no se puede adelantar el maxilar, sino con un tratamiento combinado de ortodoncia y cirugía ortognática, que logra corregir muchos de los efectos de la edad en la cara.

El Doctor Ferreras, de las Clínica MAEX de A Coruña y Ferrol, especialista en cirugía oral y maxilofacial, señala que“la cirugía ortognática o cirugía de las deformidades faciales permite tratar, ya sea por motivos funcionales o estéticos, aquellos casos en los que hay problemas de armonía facial, con movimientos de los huesos faciales (nariz, pómulos, mandíbula, mentón o maxilar superior)” y añade que “el esqueleto facial es nuestra estructura de soporte de los tejidos blandos y, por ende, uno de los más responsables de la estética facial. Cualquier modificación que hagamos en las bases óseas repercutirá de manera positiva y predecible en la estética facial”.

El Doctor Ferreras concluye que “la cirugía ortognática corrige malposiciones de los dientes y de sus bases óseas respecto a la cara”.