El CHUS y el Chuac participan en una terapia para el cáncer de mama que dura minutos

Se trata de una inyección, financiada por Sanidad, que se administra al paciente en poco tiempo

Complexo Hospitalario da Universidade de Santiago (CHUS)

Complexo Hospitalario da Universidade de Santiago (CHUS) / Antonio Hernández

El Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) y el Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) son dos de los once centros españoles que han participado en los estudios clínicos que avalan la aprobación por parte del Ministerio de Sanidad de un nuevo tratamiento contra el cáncer de mama, consistente en la combinación de dos anticuerpos monoclonales en una única inyección que se administra a la paciente en pocos minutos.

Pensado para el tratamiento del cáncer de mama HER2 positivo precoz y metastásico, uno de los más agresivos y que afecta a aproximadamente uno de cada cinco pacientes, hasta ahora se administraba por vía intravenosa durante horas frente a los escasos minutos que es necesario por vía subcutánea, manteniendo la misma eficacia, indica en un comunicado la farmacéutica Roche.

Comercializado bajo el nombre de Phesgo, es la primera formulación en oncología que combina los dos anticuerpos monoclonales, pertuzumab y trastuzumab, en un mismo vial. Se administra de forma mucho más rápida que por vía intravenosa estándar, puesto que requiere unos ocho minutos para la dosis de carga inicial y unos cinco para cada una de las de mantenimiento posterior. Frente a ello, la perfusión de una dosis de carga de pertuzumab y trastuzumab exige unos 150 minutos con las formulaciones intravenosas estándar y entre 60 y 90 minutos las de mantenimiento posteriores.

Según se recalca en el comunicado, el uso de dispositivos de acceso venoso puede asociarse a complicaciones y molestias graves para el paciente, como mayor riesgo de hemorragia, arritmia cardíaca, malposición, embolismo gaseoso, neumotórax o hemotórax, así como daño de los vasos o de los nervios, bacteriemias o trombosis. Ademas, y como indica el oncólogo médico del Clínico San Carlos de Madrid, el doctor José Ángel García Sáenz, “para pacientes a los que no se les puede implantar un dispositivo de este tipo, este medicamento es la única forma que tienen para recibir su medicación contra el cáncer”. Y añade que “gracias a esta nueva formulación los pacientes no precisan estar mañanas o incluso jornadas enteras para recibir su medicación, algo muy importante teniendo en cuenta que deben acudir al hospital cada tres semanas para recibir su medicación”. Así lo pueden hacer en menos tiempo y con una administración menos invasiva.

La financiación por parte de Sanidad “representa un importante paso adelante en el tratamiento de este tipo de cáncer de mama”, según la directora médico de Roche Farma, Beatriz Pérez Sanz, quien asegura que este avance “responde a la creciente demanda en los servicios sanitarios de contar con opciones terapéuticas más rápidas y flexibles”.

También la doctora Eva Ciruelos, oncólogo médico de la Unidad de Cáncer de Mama del 12 de Octubre, incide en que los tratamientos contra el cáncer, que suelen ser prolongados, deben ser compatibles con el día a día de los pacientes, por lo que se precisa “que las terapias no solo sean eficaces, evitando que la enfermedad progrese, sino también que sean cómodas y que ayuden a conciliar la vida personal de los enfermos, sin aumentar los efectos secundarios”.

Sobre la participación en los estudios clínicos de once hospitales españoles, entre ellos el CHUS y el Chuac, la oncóloga asegura que “la oncología española siempre está a la cabeza en investigación clínica y, gracias a la participación que hemos tenido en los ensayos con esta vía de administración, tenemos experiencia con este tratamiento subcutáneo, pese a que en España haya llegado tan tarde su financiación”.

La aprobación del tratamiento se basó en los resultados del estudio fase III FeDeriCa, que demostró que producía niveles no inferiores de ambos anticuerpos en sangre frente a la administración intravenosa.