La inestabilidad nacional demora la asamblea para elegir el nuevo líder del PSdeG santiagués

La inestabilidad política a nivel nacional retrasará la convocatoria de la asamblea local del PSdeG para elegir nuevo líder de los socialistas compostelanos. Así lo confirma a este medio el secretario de organización provincial del PSOE de A Coruña y presidente de la gestora, Diego Fernández López.

Pese a que en el momento que se constituyó este órgano temporal se estableció un plazo de 90 días para celebrar la asamblea de elección del nuevo comité local, tras la dimisión de Xosé Sánchez Bugallo después de los comicios municipales de mayo, todo apunta a que este plazo se incumplirá.

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“Cuando se presentó la gestora ya se advirtió de que, debido a la situación política nacional, con la celebración de las elecciones generales en julio y el verano de por medio, era poco probable que se pudiese cumplir este plazo”, señala Fernández a este periódico.

El responsable de la gestora indicó a mediados de junio que su intención era convocar la asamblea después del verano; sin embargo ahora apunta que la inestabilidad de la agrupación local no se podrá resolver hasta que no esté conformado el Gobierno central; y que el proceso todavía se podría retrasar más si se repiten elecciones generales, “lo cual espero que no suceda”, remarca. No obstante, Fernández explica que “si se produce una repetición electoral y en ese contexto la convocatoria de Santiago todavía no está resuelta, evidentemente, la dirección tendrá que velar ante todo por la campaña electoral de las generales, aunque insisto, no valoramos esa situación”.

Tras las elecciones del 28-M y la partida de Bugallo el PSOE compostelano quedó muy debilitado, saliendo a relucir más que nunca la división interna que existe en el seno de la formación desde hace décadas, con dos bandos perfectamente definidos con ansias de poder.

Una situación que conoce a la perfección las direcciones provincial y regional, de ahí que el partido decidiese poner al frente de la gestora que se estableció hasta que no haya un nuevo comité local a una persona desvinculada con la agrupación local.

El elegido ha sido Diego Fernández López, al cual acompañan como vocales los socialistas compostelanos Jesús Peón, Marta Álvarez Santullano, Ana Carricova, Antón Varela Tourón, Carmen Fernández Morante y Aitor Bouza. Entre los designados por la dirección socialista no se encuentra ninguno de los concejales elegidos, aunque sí hay algunos que formaron parte de las listas.

A priori, la idea es que el órgano sea lo más imparcial posible tras las discrepancias registradas en los últimos meses sobre la posibilidad de formar parte del gobierno, una idea que se ha ido desmoronando durante estos tres meses de mandato, teniendo en cuenta la línea opositora que ha marcado el grupo municipal del PSdeG, cuya portavocía ha recaído en Gonzalo Muíños, quien representa a una de las facciones de la agrupación.

Del núcleo duro de Xosé Sánchez Bugallo, Muíños fue elegido por la gestora como portavoz pese a que ocupaba el séptimo lugar en la lista y que accedió al acta de concejal porque el exalcalde renunció a la suya.

Inevitablemente, su designación como máximo responsable del grupo municipal movió la balanza decantándose por una de las facciones del partido local.

Mercedes Rosón, pese a ser la número dos de la lista y de ejercer como portavoz en las primeras negociaciones con el BNG de cara a la posible formación de un ejecutivo de coalición, idea que no cuajó, quedó totalmente relegada.

En este momento, los socialistas compostelanos esperan con ansia la convocatoria de la asamblea local para salir de la inestabilidad que supone la gestora. De ahí saldrá el sucesor de Bugallo como responsable del partido, aunque la candidatura a las próximas municipales podría disputarse en unas primarias futuras.