Una investigación de la USC constata que las olas de frío en la Península serán cada vez menos frecuentes

El trabajo ha sido publicado en la revista Atmospheric Research y muestra proyecciones hasta 2050

Chuvia en Santiago

Chuvia en Santiago / Antonio Hernández

E.P.

Las olas de frío en la Península Ibérica y en Baleares serán cada vez menos frecuentes, duraderas y su extensión espacial también será menor. Esta es la principal conclusión a la que acaban de llegar los investigadores de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) Alejandro Díaz-Poso y Alberto en el articulo 'Cold wave intensity on the Iberian Peninsula: Future climate projections'.

El trabajo, del que ha informado la USC en un comunicado y en el que también participan Dominic Royé de la Fundación para a Investigación do Clima y Nieves Lorenzo de la UVigo, ha sido publicado en la revista Atmospheric Research y muestra proyecciones para el periodo 2021-2050.

El estudio constata que la intensidad media de las olas de frío continuará siendo similar, aunque los eventos extremos disminuirán en magnitud para el conjunto de la Península Ibérica y Baleares, entre un 43% y un 54%, según la senda de representación de concentraciones de gases de efecto invernadero (RCP, por sus siglas en inglés) 4,5 y 8,5, respectivamente.

La extensión máxima de las olas de frío para el periodo 2021-2050 disminuirá de forma mucho más acentuada que la extensión media, con descensos que oscilan entre a -2,4% por década y a -5,5% también por década.

"Este estudio fue motivado por la inexistencia de estudios específicos de la intensidad y extensión espacial de las olas de frío futuras en el ámbito de la Península Ibérica y Baleares", explican desde el equipo investigador.

Estos eventos, tal y como ocurre con las olas de calor, se pueden caracterizar por cuatro dimensiones: frecuencia, duración, intensidad y extensión espacial, que se abordan en este estudio mediante la utilización del índice ECF (Excess Cold Factor).

Desarrollado por científicos australianos del mismo modo que su análogo para las olas de calor (el índice EHF), incorpora directamente el aspecto de la intensidad y el proceso de aclimatación del cuerpo humano, lo que posibilita su uso en la evaluación de los efectos de las olas de frío en la salud de la población.

Las mayores intensidades se observan en el este/noreste peninsular y zonas montañosas, y las menores en la zona oeste. Asimismo, las áreas que muestran unas mayores intensidades coinciden, en líneas generales, con las áreas en las que las olas de frío son más duraderas y frecuentes.

El número medio anual de días de ola de frío en la Península Ibérica y Baleares se reducirá aproximadamente un 50% en comparación con el periodo 1971-2000 (de 20,7 a 10 días). Las tendencias para 2021-2050 muestran una disminución de - 1.2 días/década y - 2.4 días/ década para los escenarios RCP 4.5 y RCP 8.5, respectivamente.

La duración media de los eventos para el conjunto de la Península Ibérica y Baleares también disminuye, aunque en menor medida, de 6 días a aproximadamente 5.