Una comunidad de monjes colombianos toma el relevo a las carmelitas de Santiago el 9 de marzo

Una comunidad de monjes colombianos tomará el relevo a las Carmelitas Descalzas en el convento del Carmen deSantiago.Los Hermanos Carmelitas Contemplativos llegarán desde América Latina a Compostela el próximo 9 de marzo, el mismo día en que las religiosas que habitan actualmente el monasterio se despedirán de la ciudad.Lo harán durante la celebración de una eucaristía que tendrá lugar a las 16.00 h. en la iglesia del Carmen.

Las cinco monjas que actualmente viven en el convento de Santiago iniciaron en 2022 un proceso de descernimiento que les ha llevado a tomar esta decisión: “Cada vez hemos ido disminuyendo numéricamente hasta resultar verdaderamente difícil mantener un ritmo de vida sereno y contemplativo, armonizando la vida de oración y de trabajo”, señala el padre Miguel Márquez, general de esta orden religiosa, antes de apuntar que desde la comunidad “se han buscado todas las alternativas antes de decidir el cese de la fundación”. En concreto, “se solicitó a otros monasterios de diversos países que alguna hermana carmelita pudiera reforzar el convento de Santiago, pero la falta de vocaciones actual ha hecho inviable esta posibilidad”.

El único objetivo de las carmelitas ha sido en todo momento que en Santiago no se perdiese el culto a laVirgen del Carmen. En ese sentido,“se ha llegado a un acuerdo con los Hermanos Carmelitas Contemplativos para que funden en este lugar”.Según se recoge en su página web, esta orden religiosa radicada en Colombia está compuesta por “miembros consagrados en la entrega total a Dios, a través de los votos de pobreza, castidad y obediencia. Somos amigos fuertes de Dios, como lo quería nuestra santa madre Teresa de Jesús; hermanos construyendo el Reino de Dios en santidad”.

Indican que su primera opción es “la vida religiosa como monjes carmelitas, y la opción del sacerdocio ministerial queda abierta a aquellos a quienes el Señor llame y de acuerdo al momento que viva nuestra comunidad”. Remarcan que “somos una comunidad contemplativa que a través de la oración y la intimidad con Cristo pretendemos colaborar en la construcción del Reino de Dios, acompañando a los desconsolados y a todos aquellos sedientos de Dios que deseen beber y alimentarse de la rica espiritualidad carmelitana”.

Gracias a esta comunidad latinoameriocana, la iglesia conventual de Santiago no se cerrará y en el monasterio compostelano seguirá habiendo vida religiosa. “Cuando la comunidad decidió que teníamos que tomar la dolorosa decisión de salir de nuestroCarmelo, todas las hermanas teníamos un único deseo, que la iglesia del Carmen permaneciese abierta, que la Virgen siguiera recibiendo culto, que el monasterio pudiese seguir albergando una vida de oración e intercesión y que el sepulcro y la causa de nuestra venerable madre MaríaAntonia de Jesús estuvieran cuidados”, indican desde la comunidad en la capital gallega que se despedirá definitivamente de la ciudad el 9 de marzo.

Otro convento en una situación similar al de Santiago

Lo cierto es que la comunidad carmelita de Santiago no es la única en España que atraviesa serios problemas para continuar su actividad religiosa. Esta misma semana se conocía que el convento de Ronda (Málaga), donde se custodia la mano incorrupta de Santa Teresa deJesús, está sufriendo una situación similar. Tal y como informa La Opinión de Málaga, del mismo grupo editorial —Prensa Ibérica— que ELCORREO GALLEGO, en Ronda se buscan monjas para evitar el cierre del Convento de las Carmelitas Descalzas, que actualmente necesita a dos hermanas más de la misma orden. 

Esto se debe a que no se cumple el mínimo exigido por el Vaticano. Jennifer lleva 39 años en la comunidad y es la madre superiora de este convento malagueño al borde de la clausura: “Al convento llegó una nueva normativa desde Roma, diciendo que si éramos menos de seis no se podía mantener el convento abierto”, explica. En dicho monasterio llegaron a superar el mínimo exigido; sin embargo, en los últimos años han tenido cuatro bajas: “Actualmente somos cuatro, pero una de las hermanas tiene demencia”.

De no encontrar nuevas monjas, este convento cerraría y las religiosas quedarían reubicadas en otros conventos de la orden. Además, la mano incorrupta de Santa Teresa, reliquia venerada de esta orden, tendría que ser devuelta a Castilla: “La iglesia quedaría cerrada y se llevaría la mano de vuelta a Castilla”, dice, antes de indicar que a su llamamiento desesperado “sí responde gente, pero ahora mismo se necesitan monjas con al menos 12 años de formación”. 

La “mano incorrupta” de Santa Teresa de Jesús es una reliquia venerada en el Convento de las Carmelitas Descalzas de Ronda, en España. Se dice que esta mano perteneció a Santa Teresa de Jesús, una figura importante en la historia de la Iglesia Católica y fundadora de la Orden de las Carmelitas Descalzas.

La creencia en la incorruptibilidad de ciertas partes del cuerpo de los santos es un fenómeno que ha existido a lo largo de la historia cristiana, y se atribuye a la intervención divina que preserva los restos de los santos de la descomposición.

En el caso específico de la mano de Santa Teresa de Jesús en el Convento de Ronda, se considera una reliquia de gran valor espiritual para los fieles y una muestra tangible de la conexión entre los devotos y la figura de la santa. Los fieles suelen acudir a venerar esta reliquia y a rezar en su presencia como parte de su práctica religiosa.La madre superiora indica que la mano incorrupta de Santa Teresa “atrae a turistas llegados de todas partes del mundo: vienen desde Corea, Polonia, o Rusia. Además de guías turísticos que cuentan la historia de esta iglesia”.

El arzobispo lanza su mensaje de cuaresma desde el Carmelo

El arzobispo de Santiago ha querido rendir un homenaje a las Carmelitas Descalzas de Santiago escogiendo el Convento del Carmen como escenario de su mensaje de Cuaresma. En el vídeo, que se puede ver en las plataformas digitales de la Archidiócesis de Santiago, monseñor Francisco Prieto afirma que es importante el silencio porque es “esa evocación del desierto a la que nos invita a la liturgia del tiempo cuaresmal. Porque orar es encontrar con el Señor”. “Alimentemos esa amistad con el Señor porque sólo en esa oración y en ese encuentro seremos capaces también después de reconocer al Señor en el hermano.Porque toda oración, esa oración que hacemos como hijos de un mismo Padre, como hermanos en Cristo, nos lleva esa oración también en la contemplación de Dios en el hermano”, indica el prelado compostelano.El arzobispo de Santiago también recuerda en su mensaje lanzado desde el Carmelo que “la Cuaresma es un tiempo de gracia, es también un tiempo de esperanza porque el horizonte es la Pascua, es Cristo resucitado”.