Sigue la polémica por la Panorama: el Concello evaluará los daños en el Obradoiro

Después de un análisis de las piedras levantadas en la plaza, los operarios decidirán si proceden con su reparación o sustitución

Destrozos en el suelo del Obradoiro tras la actuación de la Orquesta Panorama

Javier Rosende Novo

La actuación de la orquesta Panorama en el Obradoiro durante la noche de este miércoles marcó el arranque de las Festas da Ascensión y lo hizo por todo lo alto. Veintidós artistas sobre el gran escenario, así como efectos de luz y de color, hicieron bailar al público, mayoritariamente joven, en una plaza que estaba prácticamente llena.

La parte negativa llegó a la mañana siguiente, cuando este diario recibió varias denuncias de diferentes transeúntes informando de destrozos que presuntamente, y según indicaron los testigos, se debían al peso sobre las piedras del gran escenario montado para el espectáculo musical. “Si os pasáis por el Obradoiro veréis bastantes piedras levantadas donde estaba el escenario de la Panorama”, señalaron, incidiendo en que ya se habían realizado algunas reparaciones. 

Tras lo sucedido, el Concello hará una valoración del estado de las piedras y despúes “procederase á súa substitución ou reparación, segundo proceda”. Ésa es la previsión comunicada por Raxoi a EL CORREO GALLEGO, aunque se desconocen las fechas.

En los días previos, la Asociación para a defensa do Patrimonio Cultural Galego (Apatrigal) ya alertaba en sus redes sociales de que la ubicación del concierto de la Panorama en el Obradoiro no era la idónea. “Los vatios de potencia de la música y las miles de personas saltando que se presume asistirán, volverán a producir vibraciones que podrían acabar afectando al patrimonio”, señalaban en un comunicado.

Al respecto, la concelleira Pilar Lueiro decidió puntualizar que el Gobierno local adoptaría todas las medidas pertinentes para la conservación del patrimonio, siendo ellos mismos los primeros en querer velar por su mantenimiento. Eso sí, la edil confirmó la existencia de un informe en el que los técnicos municipales desaconsejaban la realización del macroconcierto en una ubicación declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. 

Dicho informe creó polémica en la oposición. El popular Borja Verea cargó en su día contra el BNG pidiéndole coherencia a la hora de cuidar el patrimonio de Compostela, y le afeó que con un informe de Patrimonio no hubiera medidas para la celebración de dicho evento, “cando si se prohíbe á xente que se apoie nas columnas do Pazo de Raxoi”.

Finalmente, para la realización del concierto el Concello puso como condiciones un aforo máximo de ocho mil personas y noventa decibelios de potencia máxima de sonido. 

 Para cumplirlo, equipos de seguridad controlaron el acceso al Obradoiro y, como ocurre en otros eventos multitudinarios, se inspeccionó el contenido de las mochilas y bolsas de los asistentes al espectáculo.

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