Las viviendas de veraneo en Barbanza y Costa da Morte se cotizan entre 1.400 y 2.500 €/mes

Los precios se duplicaron en la última década// En Laxe o Malpica, las agencias ya no tienen nada que ofertar Es habitual que muchas familias repitan destino y hogar// En algunas no aceptan mascotas ni grupos de jóvenes

Vista panorámica de Laxe y su playa, una de las localidades con mayor tirón turístico durante el verano en Costa da Morte /turismo de laxe

Vista panorámica de Laxe y su playa, una de las localidades con mayor tirón turístico durante el verano en Costa da Morte /turismo de laxe / J. M. RAMOS - sUSO sOUTO

Se acercan las vacaciones de verano y quienes no hayan reservado un piso o una casa en los principales destinos turísticos de Costa da Morte y Barbanza lo van a tener difícil, porque la demanda, en determinadas localidades, como Laxe o Malpica, supera la oferta. Y eso, a pesar de que las tarifas se han incrementado esta campaña y se han duplicado en la última década.

Así, en Malpica, el alquiler de un apartamento de dos habitaciones que en 2022 se ofrecía a 1.300€/mes, este año cuesta 1.500. Ello no ha sido, sin embargo, un impedimiento para que los diez de los que dispone Alquileres Malpica ya estén todos reservados “e moitos dos hóspedes son xa habituais, que reservan dun ano para outro”, afirma Liliana Villar, gerente de los inmuebles.

Cuatro de ellos los reservan desde hace varios años otras tantas familias alemanas “que veñen todos os veráns”, añadió. En el resto de apartamentos se alojarán turistas procedentes de Madrid, Barcelona y País Vasco. “O ano pasado tivemos un inquilino de Estados Unidos”, señala Liliana, quien destaca que, además de la promoción a través de internet, “a nós o que mellor nos funciona é o boca a boca”.

En Laxe, otra de la villas turísticas por excelencia de Costa da Morte, también abundan los turistas que repiten año tras año. Así lo confirma Dolores Varela, de la Inmobiliaria Fincas Laxe, quien asegura que “se houbera máis pisos dispoñibles máis se alugarían”. De media, este año las tarifas se sitúan entre 500 y 600 euros la quincena (dependiendo del tipo de inmueble) en julio, y por encima de 700 €/quincena en el mes de agosto.

Los precios se disparan si lo que se busca es un alojamiento vacacional en el ámbito de Fisterra, donde algunas viviendas se cotizan a 120 e incluso 130 euros por noche, cifras que pueden verse rebajadas a 90 € en caso de reservar estancias largas (mes completo), según indica Juan José Vieites, gerente de INcostadamorte Servicios Inmobiliarios, de Cee. Otro de los municipios con gran reclamo por parte de los turistas es Carnota. “Ten moito tirón, é unha zona que gusta”, afirma.

En su agencia actualmente no disponen de ninguna vivienda en régimen de alquiler porque, “non é un mercado agradecido, e só traballamos con xente coa que temos confianza e eles tamén confían en nós”, señala. No obstante, añade, “si que está vindo moita xente que está interesada en alugar”.

Aunque a través de agencias inmobiliarias ya es difícil encontrar pisos vacacionales en Costa da Morte, en internet todavía se publicitan alojamientos. Así, en el portal Idealista se oferta un piso en Laxe de tres habitaciones en la segunda quincena de julio por 750 euros, y otro, de 95 metros cuadrados, por 1.800 €/mes. En Fisterra, un ático de tres habitaciones en primera línea de playa, se alquila por 1.400 euros mensuales.

Y en Ribeira, uno de los principales destinos de las Rías Baixas, aunque no tan masificado como la zona del Salnés, a un mes del inicio del verano aún hay bastantes pisos entre los que elegir. A los pies de la playa de A Ladeira, en Corrubedo y, por tanto, a tiro de piedra de las dunas, se ofrece un piso de dos dormitorios, de 80 metros cuadrados, cuya tarifa es de 450 euros por semana. Eso en junio y septiembre, porque la quincena de julio ya sube a 980 euros, y la de agosto, a 1.200. Sus propietarios no aceptan grupos de más de cuatro personas, ni mascotas, ni “grupos de jóvenes”. En junio, el piso se alquila por 1.400 € todo el mes.

Ya en el centro de Ribeira, en la calle Manzanares y, por tanto, muy cerca de la playa de O Touro, un piso de tres dormitorios cuesta 1.500 euros en mayo y junio, 2.000 en julio y septiembre y 2.500 en agosto.

Y, a los pies del paseo marítimo de la playa urbana de Coroso, un piso de 68 m2, de dos dormitorios, ubicado en una urbanización cerrada, con piscina y jardín con salida al arenal, se puede alquilar en la segunda quincena de junio por 600 euros.

Algo más lejos de la arena, pero también en el centro urbano, en el barrio de Abesadas, un apartamento, cuyo propietario tampoco admite animales, se alquila por quincenas. Las tarifas van desde los 1.000 € de la primera de julio a los 1.250 de la primera de agosto. “Son los mismos precios del verano pasado, y no los voy a cambiar”, dice el dueño de la vivienda. Y son, por cierto, los mismos precios que se pagaban hace una década en esa zona, pero por un mes. Y es que en Barbanza, donde escasean los hoteles, siempre hay una gran oferta (porque hay una gran demanda) de pisos vacacionales.

Por su parte, el portal de alquileres vacacionales y apartamentos Holidu, a través de su observatorio comparativo, analizó los precios y ocupación durante los meses de verano, y en su informe concluye que Canarias (104€/noche), Extremadura y Galicia (105 €/noche) ofrecen este año los mejores precios.