“Es un tema de necesidad para el tejido empresarial"

La autovía entrará en A Estrada en 2025 mientras la de Lugo acumula un nuevo retraso en Arzúa

Acaba de firmarse el contrato para comenzar las obras del tramo A Ramallosa-Pontevea en octubre

Van a durar 20 meses

Augas de Galicia lamenta la dilación estatal para solicitar el desvío del curso fluvial Ladrón en la A-54

Un viaducto en el trazado de la autovía entre Santiago y Teo, que tendrá continuidad tras aprobarse las obras hasta la localidad de Pontevea / bernabé

Un viaducto en el trazado de la autovía entre Santiago y Teo, que tendrá continuidad tras aprobarse las obras hasta la localidad de Pontevea / bernabé / M. Manteiga

La Xunta da un paso más en las comunicaciones entre la capital de Galicia y los municipios pontevedresese de Área, tras firmarse el contrato para continuar en octubre con la autovía AG-59 en el tramo A Ramallosa-Pontevea, ya en el linde estradense, y terminarlas en 2025. Sin embargo, la de Lugo (A-54) vuelve a sumar otro retraso, tal como adelantó EL CORREO GALLEGO, por la necesidad de variar el curso del río Ladrón en Arzúa para levantar un viaducto de 123 metros de longitud.

Comenzando por la autovía a Lugo, y si en un primer momento se habló de que se concluiría este año, el estado de las obras parece confirmar que, como mínimo, no estará hasta 2024. Augas de Galicia alude al retraso en solicitar licencia por parte del Estado de cara a variar del curso fluvial –se autorizó el 30 de agosto, con previsión de prolongarse durante tres meses–, y no entienden “que o órgano promotor pedise esta autorización no mes de abril deste ano, cando se trata dunha obra en execución desde 2018 e cuxa solución debería estar prevista hai tempo”.

El tramo más avanzado, de casi 12 kilómetros, es del Palas de Reis a Melide, incluyendo cuatro viaductos (y entre ellos el de Pambre sobre el Ulla, de algo más de un kilómetro).

En cuanto a la prolongación de la autovía Santiago-A Estrada, las obras fueron adjudicadas por un importe de más de 27,2 millones de euros y cuentan con un plazo de ejecución de 20 meses. Permitirá habilitar 3,5 nuevos kilómetros para darle continuidad al trecho de la autovía libre de peaje que ya se encuentra en servicio. Sus cuatro carriles (de 3,5 metros cada uno más mediana de 1 por 2) se construirán de manera paralela a la carretera AC-841. Fue la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, la que presidía la firma entre la Xunta y la UTE adjudicataria, formada por Vías y Construcciones S.A.-Movimiento de Áridos y Construcciones de Arosa, S.L (Marconsa). En este acto participaron, el director de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez, y alcaldes de A Estrada y Teo, José López y Lucía Calvo.

Dicha intervención prevé la ejecución de dos enlaces, adecuándose el ya existente en A Ramallosa con la carretera AC-841, y otro de nueva construcción, sobre la carretera AC-241, al final del tramo y finalizando en una glorieta de 20 metros de radio sobre el propio vial autonómico. Los enlaces están proyectados como semienlaces, pero preparados para poder completarlos a posteriori y permitir todos los movimientos.

También se incluirán media docena de nuevas estructuras: el viaducto de Santa Lucía de 150 metros de longitud, 3 pasos inferiores y 2 superiores (uno en cada enlace). Y además, se prevén a lo largo del trazado variantes y caminos de servicio.

La Xunta, de manera paralela, continúa avanzando en el proyecto de construcción de las obras de la segunda fase de prolongación de la autovía, 4 kilómetros más entre Pontevea y O Rollo, ya en el municipio de A Estrada. Este segundo tramo proyectado, con una inversión estimada de 34 millones, unirá el enlace de la AC-241 con la PO-841, ya en el ayuntamiento de A Estrada, también de manera paralela a la carretera autonómica. Además de facilitar la comunicación y la vertebración territorial entre Santiago y la comarca de Tabeirós-Terra de Montes, rebajará a 10 minutos los tiempos de viaje entre A Estrada y Santiago.

José Luis Terceiro: “Es un tema de necesidad para el tejido empresarial estradense”

José Luis Terceiro, presidente de la Asociación Comarcal de Empresarios ACE de A Estrada, lo tiene claro, y subraya que la llegada de la autovía a la localidad “es un tema de necesidad para el tejido empresarial estradense”. Lamenta, de igual forma, que hoy “cualquier transporte que intente salir del pueblo va a tener dificultades; cruzar a Estrada parece igual que atravesar una gran ciudad”, apostilla el responsable de la patronal local.

En cuanto al reciente anuncio de la Xunta, para comenzar el tramo a Pontevea, y los visos de continuidad que se da ya al trayecto dentro ya de la provincia pontevedresa, cree que les permite “ver la luz, porque parece que va a ser una realidad”. Y respecto a la variante a la villa, tiene claro que “esta cuestión está mucho más atrasada”, y aporta que la visión que tienen los empresarios “no es igual que la de los comerciantes; tenemos puntos de vista distintos” a propósito de si la nueva infraestructura viaria restará clientes.