El uso de la explanada del faro de Corrubedo como rotonda atasca su conversión en hotel
Cuando Anxo Rodríguez pidió canalizar las aguas residuales, la AXI emitió un informe negativo que frenó la licencia municipal
Hace año y medio (en febrero de 2020) el empresario barbanzano Anxo Rodríguez ponía en marcha las obras para convertir el faro ribeirense de Corrubedo (junto con las otras cuatro construcciones que forman el complejo) en hotel, restaurante y cafetería, tras haber obtenido la concesión de la Autoridad Portuaria de Vilagarcía para su aprovechamiento turístico.
Sus planes pasaban por abrir el negocio aquel mismo año, pero, nada más iniciar la obra con permiso para actuaciones previas, tuvo que paralizarlos sin llegar siquiera a obtener licencia municipal.
En realidad, tras obtener la concesión, Anxo Rodríguez aportó en el Concello de Ribeira todos los informes sectoriales que le habían requerido. La cosa se torció cuando, temiendo una larga tramitación por parte de Augas de Galicia si solicitaba permiso para construir una depuradora, optó por plantear una modificación del proyecto para acometer una canalización y conectarla a la red municipal, que pasa cerca del cementerio, junto al acceso al faro.
Dicha propuesta obtuvo el visto bueno de la Autoridad Portuaria y del Concello, pero su sorpresa fue mayúscula cuando el 10 de junio de 2020, la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) le denegó permiso para cualquier obra en ese vial (la AC-303) alegando que, con la actuación planteada, se impediría la maniobra de cambio de sentido que los vehículos pesados realizan allí, “limitando así la funcionalidad de la carretera”.
Traducido a román paladino: la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade quiere garantizar que la explanada que hay frente al faro corrubedano siga siendo un lugar en el que los vehículos pesados puedan realizar maniobras de cambio de sentido.
Y, como la licencia municipal está condicionada a los informes favorables de todos los organismos implicados, el proyecto de conversión del faro en hotel está bloqueado.
Anxo Rodríguez recurrió esta resolución (asegura no haber obtenido respuesta), en la que la AXI le planteó como alternativa “solicitar la reforma de las edificaciones o el cambio de uso del acceso existente” (advirtiéndole que cualquier actuación debe ser compatible con el giro del tráfico pesado) o habilitar un lugar para hacerlo en dominio público cerca de la parcela.
El empresario se siente indefenso “porque yo no tengo competencias para solucionar un problema de tráfico, ni puedo construir una rotonda en un terreno que no tengo en concesión ni en propiedad”. Asimismo, dice que solicitó a la Autoridad Portuaria la cesión del terreno necesario para hacer una rotonda “y tampoco obtuve respuesta”.
EL VIAL SERÁ MUNICIPAL. Por su parte, la Consellería de Infraestruturas señaló a este diario que “na solicitude recibida pola Axencia Galega de Infraestruturas no marco do proxecto de acondicionamento do faro de Corrubedo non se especificaban as características da urbanización interior da parcela nin do acceso á AC-303, polo que se requeriu documentación complementaria cas medidas do acceso que se quería construír, para garantir que os vehículos que circulan pola AC-303 poidan realizar un cambio de sentido, adaptado á normativa vixente de accesos nas estradas de Galicia”.
Pero esa documentación complementaria “nunca foi achegada, polo que non se puido atender dita autorización”. Añade que, en todo caso, la AXI tramita un cambio de titularidad de ese tramo final del vial a favor del Concello “para facilitar o desenvolvemento de dito proxecto”, algo que prevé resolver en los próximos meses. Así, esa vía dejará de estar sometida a las normas autonómicas y “a actuación xa non estará suxeita á autorización da AXI”.