Juego de tronos en Boiro: un pleno para instar al alcalde

Los cuatro alcaldes del Barbanza gobiernan esta legislatura en minoría. Y unos lo hacen con más tranquilidad que otros. Y es que, mientras Adolfo Muíños (BNG) navega en aguas tranquilas tras formalizar un bipartito con el PSOE, y Lois Piñeiro (Nós Pobra) aisló al PP tras incluir en su ejecutivo a socialistas y nacionalistas, en Ribeira el popular Manuel Ruiz negocia día a día, y en Boiro el socialista José Ramón Romero sobrevive en la alcaldía pese a que quienes le auparon al poder (BNG, ICB y BN) le apoyan cada vez con menos pasión.

Es precisamente Boiro el territorio de mayor inestabilidad política en estos momentos. El portavoz del PP, Juan José Dieste, denuncia que “llevamos desde el 24 de junio sin celebrar plenos, y dos años sin presupuestos”.

Sobre la cabeza del alcalde planea desde hace meses la amenaza de una moción de censura (aunque sólo una parte del PP la apoyaría), y sus socios de investidura están cada vez más molestos con su gestión. En junio no logró aprobar los presupuestos, y sólo el BNG apoyó su plan para repartir el remanente.

El pasado 16 de agosto, el PP solicitó un pleno extraordinario con una detallada propuesta de gasto para 3,7 millones de euros del remanente. Pero el 23 de agosto el alcalde se negó a convocarlo alegando que las competencias al repecto son únicamente suyas, no de la oposición.

De modo que el PP da ahora una vuelta más de tuerca y solicita un pleno con un único punto del orden de día: instar al alcalde a incoar un expediente de crédito extraordinario y un suplemento de crédito financiado con el remanente de tesorería para gastos generales.

El mandatario lo convocó para este viernes a las 08.30 horas. De modo que sus señorías se reunirán tan sólo para eso: para instar al alcalde.

Dieste dice que “Romero no puede impedir que los temas vayan a pleno, ni evitar que los partidos hagamos propuestas”; denuncia su “parálisis y falta de gestión” y añade que “no llega a acuerdos ni con quienes le auparon al gobierno”. Además, cree que la hora para la que se convocó la sesión “es otro atranco a la participación”, porque hay ediles que tienen que trabajar y conciliar vida laboral y familiar y no podrán acudir.

“Queremos que se aplique el remanente, y cada vez queda menos tiempo para poder hacerlo”, explicó Dieste.

Por su parte, José Ramón Romero ya vaticina que el pleno “durará más bien poco”, y anunció que en la sesión ordinaria del próximo jueves día treinta “se incluyen varios expedientes muy importantes ante los que el PP tendrá que mojarse”.

Y es que entre esos expedientes figuran modificaciones de crédito por 334.000 € para acabar el edificio del Club de Remo y urbanizar su entorno (precisamente algo que exigen los populares); ayudas nominativas a los clubes deportivos por 300.000 € (algo que también urge el PP); y 119.000 € para la red de agua de Cabo de Cruz.

¿Tendrá ahora Romero el apoyo de sus socios de investidura o logrará el PP otra victoria moral desde la oposición? En Boiro, sus señorías se retuercen en los escaños con ruidosas estrategias. Como en una guerra de tronos.