Lalín contará con un equipo de producción térmica de biomasa
La Xunta de Galicia invertirá 1,3 millones de euros para la construcción en Lalín de un equipo de producción térmica con biomasa que surtirá de energía a cuatro edificios públicos del ayuntamiento, entre ellos tres centros educativos.
Así lo anunció este martes el conselleiro de Cultura, Educación, FP y Universidades, Román Rodríguez, en una visita al instituto Ramón María Aller Ulloa de la capital dezana acompañado por el alcalde, José Crespo, y el director general de Planificación Energética y Recursos Naturales, Pablo Fernández.
En la presentación, el conselleiro explicó que el “ambicioso proyecto de la Xunta” que va a tener su base en el aparcamiento del instituto Ramón María Aller forma parte del compromiso del gobierno gallego con la mejora de la eficiencia energética. “Desde el año 2009 llevamos invertidos más de 24 millones de euros en proyectos de reforma energética que se suman a los más de 32 millones destinados a rehabilitaciones integrales en colegios e institutos de las cuatro provincias”, destacó Román Rodríguez.
“Este curso le dimos un nuevo impulso a este compromiso con la puesta en marcha del Plan de Nueva Arquitectura Pedagógica que sienta los pilares para la construcción y reforma de los centros educativos en los próximos años con espacios más sostenibles y con una mayor calidad ambiental”, incidió.
Rodríguez recordó que el citado plan, que supone una inyección económica de 191 millones de euros para esta legislatura, pivota en una parte académica (con espacios al servicio de los proyectos educativos, sobre todo vinculados a la transformación digital, y generadores de inclusión), en una parte infraestructural (con espacios más amplios, saludables y una mayor integración con el entorno) y en una parte de sostenibilidad acorde con las nuevas exigencias de eficiencia energética y respeto medioambiental. En esta línea, todas las reformas de espacios y los nuevos centros educativos que se lleven a cabo hasta el año 2024 -y cuyas actuaciones específicas se irán concretando próximamente- van a seguir las pautas establecidas en el manual.
En el caso de Lalín, tal y como explicó el conselleiro, se construirá un equipo de producción térmica con biomasa en las cercanías del instituto desde donde partirán las instalaciones hidráulicas que alimentarán tanto la de este centro como el colegio Xesús Golmar, al auditorio municipal y la escuela infantil Gallina Azul Lalín-Pontiñas.
En esta línea, Román Rodríguez explicó que la medida del Gobierno gallego cuenta “con un triple impacto de beneficio en el conjunto de la ciudadanía al lograrse ahorro económico y energético, un incremento en el confort térmico por parte de los usuarios y una mejora en el mantenimiento de los montes al apostar por una energía renovable de origen autóctono”. En concreto, con el cambio de combustible se logrará una merma del 25 % en el consumo de energía y se reducirán 184 toneladas de CO2, lo que supone un 94 % de las emisiones actuales.
Todo esto , según los cálculos realizados por la Xunta, supondrá un consumo más respetuoso con el medio ambiente y un ahorro de 27.000 euros anuales.
Conselleiro de Educación
Precisamente fue en Lalín donde el conselleiro de Cultura y Educación presentó en el mes de marzo del año pasado el Plan de Nueva Arquitectura Pedagógica, asegurando que su aplicación va a suponer un “cambio radical de concepto” en cuanto al diseño e intervención en los centros escolares.
Rodríguez, lo afirmó en una visita al CEIP Xoaquín Loriga de Lalín, un centro en el que precisamente la Xunta acomete una rehabilitación integral que se va a ceñir a las premisas marcadas por el plan. El conselleiro explicó que la iniciativa es fruto “de una profunda y necesaria reflexión en este contexto de pandemia que nos tocó vivir” y que puso de manifiesto “la importancia del colegio no solo como un lugar para adquisición de conocimientos, sino también como lugar de encuentro y de interacción social”.
cualquier inversión en educación y todo lo que conlleva el mundo educativo es más que necesaria, tanto en continente como en contenido. El plan presentado el año pasado por la Xunta sobre la Nueva Arquitectura Pedagógica no sólo prevé transformar los centros en espacios más amplios, saludables y eficientes, sino también en hacerlos más seguros. Algo que todavía se echa de menos, sobre todo cuando llega un temporal y vemos como algunas infraestructuras educativas (cubiertas, cierres de patios o pistas deportivas) vuelan por los aires y todos tocamos madera si todo se queda en un simple susto y daño material. Crear equipos que permitan ahorrar energía me parece bien, pero en materiales que no se escatime.