Nace en Vedra un destilado gallego de baja graduación

Pepe Albela sabe desde bien pequeño que son los alambiques con su pota y sus serpentines ya que siendo niño correteaba por los pasillos de la destilería en la que su padre era accionista.

No tardó en conocer los secretos de la profesión y su espíritu aventurero lo llevó a abrir nuevos horizontes. Quiso la casualidad que se encontrara en su camino con otros dos emprendedores, Juan Luis Méndez, CEO de Vinigalicia cuya principal enseña es Vía Romana, y Xoán Cannas, que se había impuesto en el certamen Nariz de Oro de 2004.

Juntos comenzaron una exitosa singladura que abrieron con la ginebra Nordés. Fue tal la aceptación de esta bebida premium que ni más ni menos que una empresa conocida internacionalmente como Osborne se interesó por ella hasta que la adquirió.

Pero Galician Original Drinks ya conocía el camino correcto y fue así como sacó al mercado los vermús Nordesía, que son también del agrado ya no solo de los clientes de los establecimientos hosteleros sino también de los usuarios de grandes cadenas de supermercados.

También acertaron con un licor llamado Doctor Zas al que se le aporta pimiento de Padrón picante y que está teniendo mucho éxito sobre todo en localidades del Mediterráneo.

Pepe Albela, como maestro destilador, siguió explorando nuevos horizontes y fue así como llegó el ron Burla Negra, otro exitazo. Tomó el nombre del barco del pirata gallego Benito Soto y adaptó lo que sucedía a bordo a la nueva destilería situada en Vedra.

Los corsarios zarpaban con barriles de ron a bordo que iban consumiendo durante la travesía. Cuando los toneles ya no tenían nada se llenaban de agua de mar para que pudieran seguir ejerciendo su labor de lastre y no se escorara la embarcación. Una vez en puerto se vaciaban para volver a rellenarlos con ron, aunque siempre quedaba algo de agua salada.

Con esa idea, el ron Burla Negra tiene un agradable toque salino –gracias al agua de mar facilitada por una empresa de Costa da Morte con todos los registros sanitarios– y además envejece en barricas que antes albergaron albariño. El resultado es espectacular.

Pero la cabeza de Pepe Albela y sus socios Juan Luis Méndez y Xoán Cannas está siempre ideando nuevos productos y adaptándose a las nuevas costumbres. La última novedad es un destilado botánico de 25 grados que se denomina 25 Lolitas. Realmente se elabora siguiendo los parámetros de la ginebra pero la normativa impide que se considere así porque no alcanza los 37º.

Está hecha exactamente igual que si se tratara de una ginebra. Se elabora a partir de cereal autóctono, reconocido por su calidad y cultivado en un clima específico semejante al de Escocia, cuna de afamados cereales para la obtención de destilados.

El siguiente elemento diferenciador es el agua pura extraída de la mina auténtica de la propia finca de la destilería. Es una excavación del año 1936 formada por un entramado de 300 metros de galerías subterráneas transitables que conducen directamente al agua más pura de Galicia. Era un diamante natural en aquellos tiempos y perdura intacto hasta hoy en día.

Aderezada con botánicos, el resultado es el primer destilado gallego de baja graduación. Y pese a los matices de enebro, con presencia de cítricos y un toque floral, se nota una presencia más destacada de los cereales autóctonos, en los que predominan el trigo, la cebada y el centeno, que de los botánicos, lo que le confiere una gran originalidad. De hecho se realiza una única destilación del cereal.

Con este destilado, Galician Original Drinks pretende ofrecer el producto perfecto para el gintonic perfecto, aquel que es inesperado, inteligente y responsable para las tardes alegres y las mañanas aún mejores, gracias a sus 25º de alcohol y su sabor botánico y limpio.

Y hasta el nombre tiene su razón de ser. La abuela Lolita, antepasado del maestro destilador Pepe Albela es la antigua propietaria de la mencionada finca, La Ramallosa. En ella se cultiva cereal y se extrae el agua de mina. Es el homenaje de Galician Original Drinks a la constancia, perfeccionismo y espíritu craft de la abuela Lolita. Es el destilado que ella hubiera hecho hoy en día, inconformista pero tradicional, en búsqueda del mejor producto y siempre adaptada a los tiempos.

Con un sabor original y difícil de explicar, lo mejor para conocerlo es probarlo. Una vez más Pepe Albela abre camino y crea el primer destilado gallego de baja graduación avalado por el éxito de sus elaboraciones anteriores.

Y para que se pueda comprobar su originalidad pronto se pondrá en marcha la campaña Mil botellas, mil bares, en la que se pondrá a disposición de mil establecimientos de hostelería gallegos una botella para que al menos algunos de sus clientes puedan comprobar la calidad de 25 Lolitas.

Alargar una sobremesa a base de gintonic resultará ahora mucho más placentero gracias a 25 Lolitas, cuya graduación se aproxima más a vinos como el oporto y el pacharán que a los destilados que hasta ahora abundan en el mercado. Tiene todas las papeletas para triunfar.