Beliauskas afina su progreso tras el parón más largo de su carrera

Reconoce que ha sido el parón más largo de su carrera profesional, pero Laurynas Beliauskas se ve ya cerca del estado físico óptimo para ofrecer su mejor versión. El escolta lituano del Monbus Obradoiro encadenó infortunios hasta sumar más de dos meses alejado de las pistas pero después de cuatro partidos consecutivos considera que se halla en la senda correcta para ayudar a un grupo al que también ve en progresión positiva. Dentro de su carácter reservado, exhibe optimismo.

A principios de noviembre sufrió un golpe en el cuádriceps que le hizo jugar mermado frente al Barça el día 7 de ese mes. Unos días después encajó otro impacto en el mismo lugar y se le diagnosticó una rotura de fibras importante. Cuando estaba listo para reaparecer, el 18 de diciembre frente al Burgos, dio positivo en covid a unas horas del partido. Su propia cuarentena y la cascada de aplazamientos desde entonces retrasó su vuelta hasta el 15 de enero. En total, más de dos meses KO.

“Es mi parón más largo. Ni en verano tengo tanto tiempo libre como esta vez”, reconoce Beliauskas, quien señala la dificultad de reengancharse a la dinámica competitiva tras ese lapso de tiempo. “Fue complicado al principio en cuanto a volver a coger el ritmo, pero intento ir paso a paso y ahora me veo mejor, preparado para jugar. Siento que estoy cerca del cien por cien. Necesito cambiar algunos detalles pero creo que estoy en buena forma. Me siento bien”, argumenta.

No se ha visto todavía la versión de Beliauskas que maravilló al inicio de la temporada 2020/21, aunque el exterior de casi 25 años espera sumarse a la progresión general del grupo. La semana pasada tanto Fer Zurbriggen como Moncho Fernández coincidieron al apuntar que el Obra había dado un salto desde la derrota frente al Bilbao y el lituano también comparte esa reflexión.

“Tuvimos una reunión larga hablándonos unos a otros acerca de los problemas del equipo y de lo que debíamos cambiar. Creo que reaccionamos bien, estamos intentando mejorar y necesitamos seguir haciéndolo como hasta ahora”, explica. “Principalmente hablamos de dar lo mejor de nosotros en cada jugada, dar el cien por cien, defender mejor. Con eso sería más fácil conseguir buenos resultados”, añade.

REGULARIDAD. Tras ganar al Río Breogán en Sar, el Obra encadena dos derrotas en las canchas de Gran Canaria y Barça, en ambas con problemas comunes como la irregularidad en el tramo final y la falta de puntería. Del primero, Beliauskas tiene clara la solución: “Todo empieza en los entrenamientos. Si estamos concentrados y dando el cien por cien en cada entrenamiento, de inicio a fin, se traslada al partido”, expone. En cuanto al segundo, también es optimista: “Trabajamos duro, tiramos muchas veces después de los entrenamientos, antes... Entrenando los metemos, así que creo que es cuestión de tiempo, a lo mejor en el próximo partido metemos todos los tiros liberados”, desea.

Si algo demuestra esta Liga Endesa es que la igualdad en la clasificación es si cabe más notoria que en campañas anteriores y que en cualquier choque pueden darse resultados sorprendentes. El exterior lituano del Obra observa una realidad intrínseca a la competición española. “No hay ningún partido en el que sepamos de antemano que vamos a ganar. Todos los equipos son muy competitivos y en cada partido necesitamos dar lo mejor para ganar”, asume.

Lo que parece claro es que el Obra es más fuerte en la Caldeira de Sar. “Sobre todo en casa, podemos ganar a cualquier equipo, sin importar cuál sea el rival”, sentencia Laurynas Beliauskas.