de los huesos de su nariz
El pívot no precisará en principio de cirugía pero falta evaluar cuándo volverá a competir // Necesitará de máscara protectora
El pobre Laurynas Birutis se va a ganar el apodo del pupas en el vestuario del Monbus Obradoiro. Sin padecer ninguna lesión de gravedad, el pívot va sumando muescas en su lista de problemas físicos o incidentes que si bien solo le apartaron la pasada temporada de cuatro de las convocatorias de Moncho Fernández, en este curso ya le han impedido jugar dos de los cuatro encuentros de preparación para la Liga 2020/21. La duda es saber cuándo podrá volver a ser uno más del grupo.
En su estreno en la ACB causó baja en la jornada 11 ante el Baskonia por un esguince de tobillo tras una mala caída con Enoch, en la 26, con el Joventut como rival, por unos problemas persistentes en el cartílago de su rodilla izquierda, y en la 34 ante el Barça y en la 36, con el Estudiantes, por otro esguince en su tobillo derecho.
Ahora fue en un lance durante el encuentro del viernes frente al Sporting en el Torneo Internacional de Lisboa -que acabaría ganando el Obra- cuando Birutis se llevó un fuerte golpe en la nariz que le obligó a abandonar la cancha sangrando abundantemente. Al día siguiente, en el banquillo y vestido de calle mientras sus compañeros competían frente al Benfica, ya se apreciaba en el lituano la zona muy amoratada también.
En principio, según las primeras exploraciones que se le realizaron en la capital lusa, el pívot sufre una fractura en la nariz sin desplazamiento que no debería obligarle a pasar por el quirófano. Sin embargo, como medida de precaución, el jugador de 24 años volverá a repetir los exámenes ya en Santiago.
Lo que está claro es que la siguiente imagen que se verá de Birutis en una pista -la próxima cita será este viernes (21.15 horas) con motivo del Torneo EncestaRías ante el Unicaja- será con una máscara protectora en la cara.
También quedó claro en Lisboa que el base Braydon Hobbs debe regular de momento sus minutos a causa de la inflamación de los tendones peroneos.
Santiago. La noticia surgía ya el pasado miércoles tras la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud en la que el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas acordaban ampliar los aforos máximos en los recintos de baloncesto al 40 %.
Enseguida se añadían algunos de los requisitos de esta propuesta como mantener la distancia interpersonal de 1,5 metros, la preferencia de entrada para asistentes a los eventos para personas abonadas y público local o la prohibición del consumo de bebida y de comida, entre otros aspectos.
A partir de ahí surgía la gran pregunta: ¿quién podrá ver el Obra-Joventut del viernes día 24 a las 19.00 horas? Por parte del Monbus Obradoiro la respuesta es que se encuentran estudiando, junto a la empresa proveedora del programa de entradas y abonos, la forma de adaptar las especificaciones al pabellón de Sar con el fin de poder comunicar ya esta semana la mecánica que se seguirá para el acceso del público en el encuentro de estreno en casa en este curso 2021/22.
Sólo se tratará de un partido porque como detallaban desde el Ministerio de Sanidad la pasada semana, el aforo del 40 % será revisable en la reunión del jueves 30 y todo apunta que se podrá ampliar incluso teniendo en cuentas los buenos datos de la pandemia. c.g.
Santiago. Rehuye Moncho Fernández -y la mayoría de los entrenadores sea cual sea el deporte- de hacer análisis globales en plena fase de preparación. En el caso del Obra, la llegada tardía de algunos jugadores, las lesiones y problemas físicos, las cargas de trabajo... son elementos más que suficientes para distorsionar cualquier evaluación, pero lo que sí parece quedar claro tras la triple cita del equipo compostelano en el Torneo de Portugal es que Henry Ellenson será pieza clave en el rendimiento del equipo esta temporada.
Con un trabajo intermitente junto a sus compañeros interrumpido por su viaje a Estados Unidos para solventar su visado, el alero de Wisconsin se incorporó en plena concentración del Monbus en Lisboa y aún así demostró su calidad, su físico y su versatilidad.
El primera ronda del draft de 2016 fue el máximo anotador del cuadro santiagués en la capital lusa -17 puntos ante el Sporting, 13 con el Benfica y 25 frente al Betis- y se hizo también fuerte en el rebote -10, 7 y 10 capturas, respectivamente- demostrando que no desaprovechará sus oportunidades para lanzar desde la línea de 6,75 ni para imponer su cuerpo cuando toque fajarse bajo los aros.
También Scrubb dejó visos de su rol de todoterreno y Zurbriggen de su personalidad y su hambre dentro de la pista. c.g.