Dos partidos en 46 horas sin pausa para el Monbus Obradoiro

El Monbus Obradoiro regresó al trabajo ayer por la tarde espoleado por la importante victoria lograda el pasado sábado contra el Baxi Manresa en Sar (90-87), pero también consciente de que le espera una semana dura. Disputa dos compromisos ante rivales de entidad y con el menor descanso de la temporada. Serán 46 horas exigentes.

La semana incluye dos jornadas de la Liga Endesa, que el plantel de Moncho Fernández afrontará en un corto margen de tiempo. Visita el viernes al Valencia Basket en La Fonteta (21.15 horas) y recibe el domingo en el Multiusos Fontes do Sar a un Herbalife Gran Canaria en un gran momento (17.00 horas).

La expedición obradoirista viajará a la localidad levantina el jueves al mediodía, con vuelo Santiago-Madrid y otro Madrid-Valencia antes de aterrizar junto al Mediterráneo por la tarde. Disputado el choque ante uno de los cuatro representantes españoles en la Euroliga, que ayer conoció su eliminación por la victoria del Zenit, el conjunto santiagués pernoctará en la ciudad del Turia y emprenderá el regreso en la mañana del sábado. Será de nuevo por vía aérea y parando en Madrid, por lo que sopesa aprovechar las horas de espera para completar una sesión de entrenamiento en la capital española. Cada minuto cuenta, porque el Obra aterrizará en Santiago alrededor de las 17.00 horas, a un día exacto de ejercer de local ante el Granca.

Será la segunda vez que la escuadra de Moncho Fernández dispute dos partidos con tan solo un día de descanso entre ambos, y curiosamente ante los mismos rivales aunque en el orden inverso. El pasado 25 de octubre, el Obra venció al Gran Canaria al mediodía y cayó contra el Valencia en la noche del martes 27, con un tiro de Kassius Robertson sobre la bocina al que le sobraron décimas para ser válido. Eso sí, en aquella ocasión el descanso entre ambos duelos fue mayor, de 54 horas. Ahora, de unas 42.

La presencia de diecinueve equipos complicó aún más el calendario el verano pasado y las suspensiones provocadas por la COVID-19 agravan el problema. Así, las semanas con doble cita son más habituales y fueron cinco las ocasiones en las que el Obra encadenó partidos dejando dos días por el medio. En septiembre enlazó dos victorias ante el Manresa y el Betis, en octubre superó al Gipuzkoa y tres días más tarde claudicó en la cancha del Real Madrid, en diciembre perdió contra el Joventut un jueves pero el domingo superó al Zaragoza, en febrero hiló dos tropiezos en la ciudad maña y en Andorra, y entre febrero y marzo también se fue de vacío ante Tenerife y Estudiantes.