El calendario no da tregua
SIN APENAS TIEMPO para el análisis y mucho menos para lamentarse de la última derrota, Obradoiro y Gran Canaria medirán esfuerzos esta tarde bajo el condicionante del desgaste físico. Los isleños han tenido dos días más de descanso y preparación a la hora de encarar este partido. El ritmo no cesa y tan solo queda un mes para finalizar la competición, donde cada jornada es más decisiva que la anterior con muchos frentes abiertos en la lucha por entrar en play-off o evitar el descenso.
Los isleños concentran toda su energía en la competición nacional tras caer en semifinales de la Eurocup. Porfi Fisac insistió en sala de prensa en la importancia de mirar hacia delante y aprovechar el buen rendimiento del equipo tras obtener una gran racha de resultados con cuatro victorias en el último mes.
Esta plantilla ofrece múltiples opciones en función de su circulación de balón. El equilibrio entre su juego interior y exterior va ligado a las ventajas con emparejamientos defensivos. Cualquier alternativa que produzcan con mano a mano encadenando bloqueo directo o esquemas iniciales de 5 jugadores abiertos, genera mucho desequilibrio en las defensas rivales que a menudo descuidan la línea exterior y juegan con pases extra hasta lograr una finalización liberada. El uno contra uno al poste bajo de los aleros es cada vez más común, principalmente con Beirán y Okoye.
No todas sus ventajas son jugando en estático. El bloque canario puede ser un auténtico correcalles y transicionar a gran velocidad si la defensa es efectiva. Para ello recurren a últimas ayudas que llegan desde atrás con los pívots cerrando penetraciones y saltando al tapón con agresividad. En ocasiones descuidan el trabajo en el perímetro cambiando permanentemente el emparejamiento inicial.
A ello se aferra el conjunto compostelano para lograr un nuevo triunfo que le aleje de la zona baja. Poner el foco en los tiros abiertos que saquen de posición a la defensa amarilla y encontrar toda esa potencia interior sobre Enoch, Daum, Cohen y Birutis que tan bien funcionaron las jornadas anteriores.
El punto de partida es una vez más la defensa. Cuando se alcance esa cohesión táctica mezclada con intensidad, el ataque será mucho más fluido y anímicamente el equipo se sentirá más cómodo a lo largo de cada cuarto. Paciencia y sangre fría, las claves del encuentro para afrontar cuarenta minutos de un desgaste muy alto.