El legado de Yago Iglesias en el Compostela
Yago Iglesias deja el banquillo del Compostela después de cinco años en los que devolvió al club a Segunda B, el objetivo que le había marcado la entidad cuando ambas partes se unieron, allá por 2016. Pero más allá de los éxitos deportivos, la estancia del técnico en el Vero Boquete deja un estilo propio, una forma de jugar y una filosofía que han actuado como atracción para acceder a futbolistas que de otro modo se hubieran decantado por proyectos económicamente más ambiciosos. Y con esa forma de actuar, bajo la batuta del tercer entrenador con más partidos en la historia del club, el equipo ha ido dejando para el recuerdo una retahíla de récords, dos títulos de liga, un ascenso, una fase autonómica de la Copa RFEF, una Copa Diputación y dos participaciones en la Copa del Rey.
La historia comenzó a escribirse en mayúsculas en la segunda temporada de Yago Iglesias (17/18), cuando el equipo se proclamó campeón de liga en Tercera. Para lograrlo acabó resultando clave una serie de diez victorias consecutivas, racha con la que el Compostela igualaba su mejor registro histórico de triunfos seguidos, que databa del curso 67/68. Solo una derrota ante el Bergantiños en San Lázaro les privó de establecer una nueva marca absoluta en solitario.
No fue ese el único éxito de la temporada del primer alirón, pues los 86 puntos que daban el título de liga suponían la mejor puntuación del Compostela en toda su historia en cualquier categoría nacional.
También dejaría datos para el recuerdo la campaña 19/20, la primera afectada por la pandemia y la segunda en la que el Compostela se proclamaba campeón a las órdenes de Iglesias. Ese año llegaban otros dos récords, el primero de ellos a manos de Pato Guillén. El guardameta compostelanista echaba el candado a su portería y conseguía permanecer imbatido durante 798 minutos, algo jamás logrado por un portero del cuadro blanquiazul. La racha de Pato, que no encajó ni un gol durante ocho partidos, así como los minutos correspondientes a los choques ante Estradense (encuentro que dio inicio a la serie) y Ourense CF, terminó en O Couto. Allí el Compostela recibía dos tantos, precisamente ante el equipo contra el que, meses después, acabaría logrando el ascenso a Segunda B. Los 798 minutos de imbatibilidad superaban el registro anterior de Ramón Ángel Docobo, quien en la campaña 89/90 aguantaba 652 minutos sin tener que recoger el balón del fondo de su portería.
El curso interrumpido por el coronavirus también permitió igualar la marca histórica de victorias consecutivas como local en una misma temporada. El Compostela se mostró autoritario en los trece primeros encuentros de liga disputados ante su público, adjudicándose el triunfo en cada uno de ellos e igualando un récord con cuarenta años de vigencia. Los pupilos de Yago Iglesias hicieron lo mismo que el colectivo de José López en la campaña 79/80, pero una derrota contra la UD Ourense impidió conseguir el registro histórico en solitario.
EL ASCENSO, A LA TERCERA. Las alegrías son hermanas de las penas, y al Compostela de Yago Iglesias también le tocó vivir penurias con una importante dosis de crueldad. El ascenso a Segunda B por momentos pareció no estar reservado para el equipo del técnico santiagués, que se quedó con la miel en los labios en dos ocasiones, antes de dar el salto en el play-off de Balaídos.
Dos piedras son las que se encontró Yago Iglesias en su camino. Y las dos, ante su afición. La primera de ellas llevó el nombre de Salmantino, actual Salamanca CF UDS. El Compostela, campeón en la temporada 17/18, llegaba con ventaja a la última eliminatoria por el ascenso, después de un 1-1 en el Helmántico. Con todo a favor y con miles de espectadores en el Vero Boquete el cuadro charro aguó la fiesta, se llevó la victoria y el ascenso.
La crueldad se repitió un año después, aunque esta vez en el primer cruce. El Compostela cerraba la primera eliminatoria en casa, ante el Alavés B. Después de perder 1-0 en Vitoria y de empezar cayendo 0-1 en el Vero Boquete el cuadro blanquiazul se ponía 3-1 en los últimos minutos. Pero cuando la épica le hacía acariciar el pase, llegó el tanto postrero del filial alavesista.
Se volvía a negar el ascenso, que sí llegó al tercer intento, en Balaídos, a partido único y contra el Ourense CF. Fue Pablo Antas el encargado de devolver al Compostela a Segunda B desde el punto de penalti.
EN EL PODIO. Las cinco temporadas de Yago en San Lázaro le han valido para situarse como el tercer entrenador con más partidos en la historia del Compostela. Con 178 encuentros a sus espaldas entre liga, play-off y Copa del Rey solo la pandemia le impidió superar a Santiago Sanz, Yayo, y situarse en el segundo peldaño del podio (199). Lejos de su alcance queda Fernando Castro Santos, con 263 choques. Los 178 partidos de Yago arrojaron 92 victorias, 44 empates y 42 derrotas.
Aunque tanto Castro Santos como Yayo se sentaron en el banquillo del Compostela durante seis temporada, Santos es el único que supera las cinco que ha permanecido Yago Iglesias de forma consecutiva.