Luis de la Fuente: continuismo con matices tras cesar a Luis Enrique
Ganador de los Europeos sub-19, sub-21 y la plata en Tokio 2020 , tiene 61 años // Luque suple a Molina, que dejará la dirección deportiva de la RFEF
Luis de la Fuente (Haro, La Rioja 1961) se ha convertido en el sustituto de Luis Enrique como seleccionador de España. Desde 2013, figura en la estructura de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ganando los Europeos sub-19, sub-21 y la plata olímpica en Tokio2020. Ahora, a los 61 años, le llega su gran oportunidad en la élite para apostar por una línea continuista, pero con matices en el juego y el día a día. Previamente, dirigió a Bilbao Athletic y Deportivo Alavés a la vez que se centró en el fútbol formativo.
Un hombre de la casa, que desde la llegada de Luis Enrique al banquillo ha tenido que reinventarse convocatoria a convocatoria al ver cómo sus futbolistas daban el salto a la absoluta, que ahora le llega a él, y seguir sacando talento de la gran cantera del fútbol español.
De la convocatoria de futbolistas para Qatar 2022, a 14 los conoce de su paso por las categorías inferiores en las que ha ido acumulando éxitos. Por esto, la apuesta por parte de la RFEF es continuista. Y por la idea de fútbol de dominar el juego y ser protagonistas con balón que promulga Luis de la Fuente. Eso sí, con variantes tácticas.
El técnico riojano, aunque ha jugado con un 4-3-3 y 4-4-2 a lo largo de su carrera, pero tiene en el 4-2-3-1 su esquema favorito. Mantiene esa figura del mediapunta, el 10, en sus planes; construye a sus equipos en torno a un centrocampista por el que gira todo (lo han sido Ceballos, Zubimendi y ahora Turrientes en la sub-21); y la figura del falso 9 ha sido clave en sus últimos éxitos, con Oyarzabal como tal en el Europeo sub-21 y los JJOO de Tokio.
Todo con una base defensiva sólida. En el actual proceso de clasificación para el Europeo sub-21, que se disputará del 21 de junio al 8 julio, y amistosos de preparación, seis goles encajados en 11 encuentros y siete porterías a cero. Con 46 goles anotados.
“Soy un hombre de éxito porque hago lo que me apasiona”, así se definió Luis de la Fuente en una entrevista con EFE antes de viajar a Japón para los Juegos Olímpicos. Una persona que vive por y para el fútbol y al que para creerte que tiene 61 años tienes que pedirle el DNI. Su gran forma física no pasa inadvertida. Durante las concentraciones, cuando el resto se levantan, él ya vuelve del gimnasio de hacer su rutina.
Es amable, cercano y siempre con buenas palabras con la prensa y la gente que sigue el día a día de las categorías inferiores de España.
Los recuerdos de Iñaki Sáez y Luis Suárez, que también pasaron de categorías inferiores a la absoluta de España y no cumplieron las expectativas serán recordados en sus primeros pasos. Sin embargo, en Inglaterra, la opción funcionó. Gareth Southgate pasó de la sub-21, sin haber ganado títulos, a la absoluta y colocó a los ‘tres leones’ en semifinales de un Mundial y finalistas de una Eurocopa que perdieron en los penaltis.
Un Luis de la Fuente sin experiencia en un gran club, pero acostumbrado a manejar la presión con maestría. Le ocurrió antes de los Juegos Olímpicos, cuando se le pedía convocar a Sergio Ramos con insistencia, en la opinión pública e interna, y se resistió. Apostó por los suyos. Durante los propios JJOO le cayeron críticas por el juego. Y acabó con la plata al cuello, el mejor resultado en este torneo en 21 años.
El riojano es un hombre de frases. Casi a diario cambia su foto de WhatsApp y escoge una para acompañar la imagen. “Cuanto más trabajo, más suerte tengo” eligió para el día de la final de los Juegos Olímpicos.
Este jueves, el día que fue anunciado como seleccionador absoluto, se decantó por una foto suya en rueda de prensa, sonriente y con tres mensajes. “Por respeto, escucho todo lo que me dicen. Por coherencia, hago siempre lo que considero que tengo que hacer...”; “Las decisiones de Dios son misteriosas, pero siempre a nuestro favor”; y “Unidos contra el Cáncer”. Así es el nuevo seleccionador.
Su caso no es la única novedad ya que José Francisco Molina dejará la dirección deportiva de la RFEF el próximo enero, en tanto que Albert Luque pasará a ser nuevo director de la selección española.
Doha. La eliminación en los penaltis contra Marruecos aceleró a este jueves el fin de la era Luis Enrique en la selección española, después de 48 partidos al frente del equipo, en dos etapas diferentes, con 27 victorias (un 56 por ciento), 14 empates y sólo 7 derrotas, con 100 goles a favor y 38 en contra, con 21 choques imbatido, con 66 jugadores diferentes y con tan solo tres triunfos en sus dos grandes torneos, la prometedora Eurocopa 2021 y el decepcionante Mundial 2022.
En el torneo continental de hace año y medio, entre Sevilla, Copenhague, San Petersburgo y Londres, España venció dos de sus seis choques (uno en la primera fase contra Eslovaquia, a la que goleó por 5-0, y otro en la prórroga de los octavos de final contra Croacia, a la que superó por 3-5). No perdió ninguno en el tiempo reglamentario.
Y empató con Suecia (0-0), Polonia (1-1), Suiza (1-1) e Italia (1-1). El último lo eliminó en la tanda de penaltis, los mismo que le ha ocurrido ahora en Qatar 2022.
Tras el atracón de goles de la primera cita contra Costa Rica (7-0), la mayor goleada de la historia de los Mundiales de la selección española, por encima de otra que protagonizó Luis Enrique, entonces como jugador, en Francia 1998 (6-1 a Bulgaria), España ha sumado tan solo esa victoria, la derrota ante Japón (2-1) y los empates contra Alemania (1-1), que desató elogios, y contra Marruecos (0-0), que disparó las críticas y provocó el cese posterior del seleccionador.
El equipo de Luis Enrique, cuya identidad ha sido inconfundible de principio a fin (”ha representado a la perfección mi idea futbolística y la del ‘staff’” en el Mundial, según dijo el entrenador tras la eliminación), ha sumado 27 victorias en 48 partidos, divididas en dos etapas desde su debut con un triunfo por 1-2 contra Inglaterra el 8 de septiembre de 2018 en Wembley en la Liga de Naciones, con goles de Saúl Ñíguez y Rodrigo Moreno.
Ni un título pero un balance de 56 % de partidos ganados, ese es el resumen de la huella del asturiano al frente de La Roja que tropezó en este Mundial de nuevo dejando claro que el éxito del Mundial de 2010 no fue por casualidad pero tampoco es algo fácil de replicar. Iñaki Dufour