“Me encanta esto, como la vida”, dice Simeone ante el Atlético-Valencia

Madrid. “La unión”, proclamó ayer Diego Simeone, el entrenador del Atlético de Madrid, como el factor clave para salir del momento actual, porque su equipo “siempre” fue “fuerte a partir de estar todos juntos”, al tiempo que enfocó directamente al presente, porque “no vale lo que hiciste ayer, vale hoy y me encanta, hay que reivindicarse continuamente”, como “la vida misma”.

Seis victorias en los últimos 19 partidos oficiales, sólo tres en los diez más recientes; a 16 puntos del liderato en LaLiga Santander, de la que es el actual campeón; eliminado en una semana de la Copa del Rey y de la Supercopa de España y dentro de una crisis desconocida bajo el mando del técnico argentino.

Con ese decorado, el Atlético defiende su cuarta posición este sábado contra el Valencia en el estadio Wanda Metropolitano. Enfrente José Bordalás, que tiene el desafío pendiente de ganar al conjunto rojiblanco para creer en la Champions.

Después de dos despropósitos consecutivos en la Supercopa ante el Athletic y en la Copa del Rey frente a la Real Sociedad, desbordado una vez más por sus propios problemas, especialmente en su defensa, pero extensivos a cada línea, el Atlético y su técnico se reencuentran con su afición, con una pinta más que nunca de plebiscito, cuando más debate surge entre los seguidores sobre la figura del técnico más ganador de la historia del club.

Recupera Simeone a sus dos centrales de más nivel y confianza: Stefan Savic y José María Giménez. No disponía de los dos a la vez desde hace diez partidos, desde el 1-4 al Cádiz del pasado 28 de noviembre, justo antes de empezar la secuencia de cuatro derrotas en la Liga.

Los dos serán titulares. Igual que Luis Suárez, confirmado por Simeone, tras dos suplencias consecutivas.

Cuatro puntos menos -un partido más- tiene el Valencia de Bordalás, que nunca ha doblegado a Simeone. EFE