“Gracias a él nuestro baloncesto es mejor”

En el dial de los años 90, emergió un comentarista que al hablar de nuestro baloncesto contaba en primera persona secretos de la NBA y la liga universitaria con tanta sabiduría como discreción: Miguel Ángel Paniagua, Pantxo para unos, Pani para otros y El Profe, para todos.

Nacido en 1956 en Madrid, con ocho años ya escribe crónicas y busca el balón de basket en cuanto acaban los partidos de fútbol en el colegio de Segovia donde le endilgan rol de portero vista su altura.

Siendo veinteañero el destino laboral le espera tras una esquina de Estados Unidos, cursando un postgrado recibe su primer encargo para hacer scouting. Ex jugador (pívot de 1,93 m.), decidido, cordial, ducho igual en economía que basket, su inglés fluido hace que su papel de puente entre EEUU y Europa le sentase como un traje a medida. Sin miedo a moverse, como buen hijo de un empleado de Renfe, debuta en Arizona State y luego es fichado para asesorar a unos aperturistas Phoenix Suns en los años 80, días en que el baloncesto europeo importa en EEUU lo que la NBA en la Albania del Telón de Acero.

Nosotros ansiábamos saber todo lo del otro lado del Atlántico, así, Miguel Ángel colabora igual en El País que en la Cope, contando lo que pocos pueden. Y, de pronto, un 31 de octubre de 1986, un español debuta en la mejor liga del mundo: Fernando Martín, cuya llegada a los Blazers debe mucho a su amigo Miguel Ángel, que en su columna de Gigantes titulada La soledad del mánager le dedicó esta frase post mortem: “Nunca caminarás solo”.

Ojeador de franquicias NBA, acá inició una pionera labor como agente de jugadores estrenada con Kevin Magee. Ofrece su talento al Estudiantes, que no recoge el guante que sí agarra el CAI Zaragoza, club que meses después gana la Copa del Rey de 1984 con el center norteamericano como mesías.

Llueven los años y Miguel Ángel se convierte en un analista clásico de la radio capaz de tratar con cariño al baloncesto, antes en la SER y desde hace diez años de nuevo en Cope (Tiempo de Juego). Como otro comunicador castellano clave en nuestro deporte, Antoni Daimiel (criado en Valladolid), Miguel Ángel es un sabio sosegado.

Su didáctica sin alharacas, cala. Apodado El Profe, porque lo es, en 2019 recibe el Premio a la Excelencia en la Enseñanza del IE (Instituto de Empresa) como profesor universitario y en Twitter, lo agradece así: “Muy honrado por recibir el Muy agradecido a la institución, al claustro de profesores y, sobre todo, a los estudiantes”.

Aficionado al ajedrez, su calmado punto de vista permite salvar el jaque de la estadística avanzada y hace que muchos periodistas sintamos orgullo al decir: “Miguel Ángel Paniagua, uno de los nuestros”.

UNO De LOS NUESTROS Vicente Mateo, redactor del área de Informativos en Castilla La Mancha TV y colaborador habitual del programa Basket And Life, que conduce Antonio Sánchez (Movistar) como proyecto paralelo en Youtube, nos ayuda a retratar a Miguel Ángel Panigua, uno de los nuestros para quienes trabajamos en la prensa hablando de baloncesto. Así le define Vicente: “Es un pionero. Ahora que estamos acostumbrados a tener cientos de datos gracias a internet y que todos vemos a diario un montón de high lights en redes sociales sobre la ACB, la Euroliga y la NBA... conviene recordar que antes no era así. Antes esta corriente de información solo estaba al alcance de personas como Miguel Ángel Paniagua y algunos otros que eran una mezcla de pioneros, privilegiados y locos, dicho con respeto. Empezó un camino en el mundo de la Comunicación dedicada al baloncesto que luego hemos seguido, desde nuestra modestia, otros muchos. Sus contactos acercaron al baloncesto de Estados Unidos y el europeo, y esos puentes todavía existen... Es cierto que él tuvo unas oportunidades únicas al vivir en EEUU pero su buen trabajo ha hecho que nuestro baloncesto sea ahora mismo mejor. Domina la información como nadie, tiene acceso directo a personas vinculadas a grandes monstruos como Jordan y su labor como pionero, soñador, luchador, y amante del baloncesto ha hecho y hace que otros muchos amemos este deporte”.