Victoria épica de un Estudiantil que no tira aún la toalla

Logró un imposible el Estudiantil, noqueado al descanso con un corto 2-0 que fue capaz de voltear en la última jugada del choque tras un cambio de guion inesperado. Porque nada parecía apuntar a la reacción del conjunto de Gelucho tras el descanso, al que llegó rendido, descompuesto y superado por el empuje de un bloque unionista que llegaba con la mejor serie de resultados de la temporada y que pasó de verse cerca de salir de la la zona roja a recibir un revés de consecuencias imprevisibles.

Se plantó en campo contrario ante el condescendiente repliegue del Estudiantil el colectivo rojillo, que golpeó antes del cuarto de hora en una gran movimiento dentro del área de Hugo García. Champi rondó el segundo.

Estaban fuera del duelo los visitantes, con constantes consultas al banquillo. En otra lucha estaba Rubén Márquez, sustituido a la media hora después de varios encontronazos con Viti, Gabi y Villa y con una amarilla que estaba cerca de roja. Sebas pudo igualar tras cazar un rechace, pero en el área contraria volvió a decidir el juego de espaldas de Hugo García, que habilitó a Champi. Le faltó intensidad y actitud al Estudiantil, y unos centímetros a Chiño antes del descanso.

El segundo periodo fue otro partido. Porque la UD Ourense se empeñó en perdonar y en dejar crecer a un Estudiantil que fue ganando metros. Chiño castigó un despiste defensivo tras un buen pase de Suso Martínez.

Ahí empezaron los nervios en la afición, que se temía otro desplome. La mano de los entrenadores fue decisiva. Currás hundió a los suyos con los cambios y Gelucho dio en la tecla con Anxo Vilas, héroe con dos dianas, la del 2-3 en la agonía del añadido. Una vigorosa recuperación para mantener la esperanza.