Santiago
+15° C
Actualizado
martes, 23 abril 2024
16:11
h

Vuelve la ACB con un Obra que contagia ilusión y hambre

El proyecto 2021/22 del Monbus sube esta tarde el telón a la Liga Endesa frente al Unicaja

Se han ido Ozmizrak (Bahçeşehir), Enoch (Baskonia), Cohen (Maccabi), Czerapowicz (UCAM Murcia), Daum (Derthona Basket) y se añorará de forma especial al hombre pegamento Pepe Pozas (Real Betis). Han llegado este verano los bases Braydon Hobbs (Oldenburg) y Fer Zurbriggen (Obras Sanitarias), el alero Thomas Scrubb (JL Bourg-en-Bresse) y los interiores Henry Ellenson (Raptors 905), Marko Filipovity (Pesaro) y Viny Okouo (Acunsa GBC). Pero lo que no varía, más allá de adaptar el propio ideario y filosofía de juego a las características de los seis recién llegados al roster, es la imagen de un Monbus Obradoiro “solidario, esforzado, dinámico, que se pasa el balón, que trabaja en los dos lados de la pista y que se esfuerza”.

Para ello lleva trabajando el grupo bajo las directrices de Moncho Fernández , Gonzalo Rodríguez y Víctor Pérez en las últimas siete semanas de una pretemporada con altibajos en cuanto a la llegada de los jugadores, los viajes y alguna lesión que frenó la progresión individual y del grupo, porque el día D y la hora H ha llegado: esta tarde, a las 20.00 horas (Movistar Deportes-Dial 53), espera el Unicaja en el Martín Carpena y solo hay un objetivo, ganar.

paciencia. “Será complicado tener el mejor nivel al principio, pero sí espero que se vea a un equipo que está capacitado ya para competir, que se va a esforzar y que va a pelear”, arengaba en la previa el entrenador santiagués, horas antes de levantar el telón a su duodécima temporada consecutiva al frente del Obra. Porque aún sin saber el resultado del primer partido de la Liga Endesa 2021/22, el conjunto compostelano ya ha logrado la primera de las victorias: llegar con el plantel al completo a tierras andaluzas. Atrás parecen quedar los problemas en el tobillo de Braydon Hobbs y, aunque sobre la bocina, también se ha conseguido el pasaporte jamaicano para un Kassius Robertson que pasa a ocupar plaza de Cotonú.

Con doce jugadores, la mitad de ellos nuevos en el Monbus y cinco además debutantes en España, el proyecto obradoirista hila su undécimo curso en la ACB con la ilusión de quien sabe que se hará más fuerte ahora que tendrá al público para arroparle, arengarle y empujarle, y el orgullo de sentir el respeto y admiración de sus rivales, que más allá de insistir en que el Obra “es ese equipo que juega diferente” saben de las dificultades que entraña enfrentarse a un equipo trabajado al milímetro y siempre en progresión. Ojalá esta campaña también el estamento arbitral destile la misma deferencia: Peruga, Sánchez Mohedas y García González podrán verificarlo desde hoy.

Alicientes. Son varios los alicientes para que el obradoirismo no pierda de vista a su equipo desde el primer salto inicial. A la sobriedad de Hobbs, ese base con experiencia, inteligencia y excelso pasador tan necesario en la pizarra monchista le ha salido como contrapunto la electricidad, intensidad y carácter de Zurbriggen; junto a ellos Scrubb opondrá trabajo de gladiador en ambas partes de la cancha y calidad para herir con su tiro y su lectura del juego al mínimo despiste del rival; el ex NBA Ellenson será el matador desde el triple -uno de ellos en un Monbus ahora con más fondo de armario en este aspecto- y utilizando su polivalencia también para el juego dentro de la pintura; Filipovity aportará rebote, movimiento sin balón y peligro ofensivo en cuanto cobre confianza; mientras Okouo hará valer su físico para robar minutos a un Birutis que con regularidad promete marcar de nuevo diferencias bajo los aros.

Con más armas, más versatilidad y a poco que el mal fario de las lesiones se olvide de una vez de visitar el vestuario compostelano, el obradoirismo pasará página a una temporada 2020/21 extremadamente difícil para recibir un premio más que merecido por su lealtad. Oliver, Muñoz, Beliauskas, Robertson y Álex Suárez, junto al mencionado Birutis, son hombres cuya calidad y compromiso con el club ha quedado sobradamente demostrada y merecen por fin tener su año.

Hoy arranca la nueva travesía y el grito que surge es: ¡Bienvenidos al espectáculo!

Un anfitrión que quiere regresar a la mesa de los ‘gallitos’ de la ACB

Con la continuidad de Katsikaris pero con cambios dentro del staff técnico, un nuevo presidente -el ex árbitro de fútbol Antonio Jesús López Nieto-, la decisión de abandonar la Euroliga para disputar la Basketball Champions League, y tres fichajes -Norris Cole (Asvel Villeurbanne), el gallego Jonathan Barreiro (Zaragoza) y Michael Eric (CSKA Moscú)- el Unicaja ejerce hoy de anfitrión del Obra con la necesidad de convencer a su público desde el primer día.

Tiene el club malacitano la exigencia de la redención tras una última temporada demasiado gris. Sin embargo, aunque a su bloque de jugones -con Jaime Fernández y Alberto Díaz al frente a la espera de Carlos Suárez, al que sustituirá Adgar Vicedo mientras se recupera de una lesión- suma el talento y sobre todo físico de fichajes de excelsa calidad, el cuadro andaluz parte con el mantra de que debe mejorar su defensa para regresar a la mesa de los gallitos de la Liga Endesa.

“Me cuesta trabajo juzgar y comparar equipos que solo conozco desde fuera. Lo que sí sé es que es un Unicaja muy bueno, con incorporaciones de primer nivel y manteniendo una estructura de nacionales de grandes jugadores y el mismo entrenador, por lo que mantendrán la misma filosofía. Eso hace que todo sea más fácil al principio”, aceptaba Moncho Fernández en la previa.

El entrenador griego Fotis Katsikaris mantiene hasta última hora la duda de Brizuela tras el esguince de tobillo que sufrió en Vilagarcía.

19 sep 2021 / 01:00
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
TEMAS
Tema marcado como favorito
Selecciona los que más te interesen y verás todas las noticias relacionadas con ellos en Mi Correo Gallego.