La protesta de los bateeiros deja dos detenidos y varios heridos entre manifestantes y policías

El sector mejillonero tenía decretado para el día de ayer un paro productivo que un nutrido grupo de productores aprovechó para protestar en Santiago aún sin autorización oficial

Los manifestantes se desplazaron a la Comisaría de Policía Nacional donde se encontraban los detenidos / EP

Los manifestantes se desplazaron a la Comisaría de Policía Nacional donde se encontraban los detenidos / EP / Mateo Garrido

Dos detenidos y varios heridos entre manifestantes y policías es el resultado de la protesta realizada ayer por el sector mejillonero en las inmediaciones de San Caetano en el marco del conflicto de la mejilla que enfrenta a los bateeiros con la Consellería de Mar.

Los ánimos estaban más caldeados que en las últimas semanas tras la decisión que tomó del departamenteo que dirige Rosa Quintana el pasado martes de cerrar de nuevo los 25 kilómetros de costa que había reabierto para el trabajo de los miticultores que buscan allí mejilla para encordar sus bateas. Una decisión que hizo que las grandes agrupaciones mejilloneras Opmega, Amegrove y Socomgal abandonaran la mesa de diálogo en la que mantenían contactos con representantes del Ejecutivo autonómico.

Para el día de ayer estaba decretado un nuevo paro productivo, que un nutrido grupo de productores aprovechó para acudir de nuevo a la capital gallega para hacer ganar visibilidad a su reclamación: la retirada del artículo 13 aprobado en 2019 y “que nos impide realizar o noso traballo”, comentaba alguno de los productores. No contaban con la preceptiva autorización de la Delegación del Gobierno, sin embargo, alrededor de las ocho y media de la mañana unos 300 productores llegaron a las inmediaciones de San Caetano donde había ya un elevado número de efectivos policiales.

El momento de la detención de uno de los productores en las inmediaciones de San Caetano / XoÁn Rey

El momento de la detención de uno de los productores en las inmediaciones de San Caetano / XoÁn Rey / Mateo Garrido

Según explicaron varios de los manifestantes en declaraciones a EL CORREO GALLEGO, “viñamos a facer unha protesta pacífica como noutras ocasións, pero ao acercarnos á valla recibíronnos a paus”. Sin embargo fuentes policiales señalan que la intención de los manifestantes no era encaramarse a la valla, sino saltarla, dando inicio de esta forma la carga. Los vídeos de la trifulca inundaron de manera instantánea las redes sociales, en ellos se puede ver como la Policía inicia una carga al ver que los manifestantes no cesan en su empeño de llegar hasta la valla del edificio administrativo de la Xunta, y como estos responden con palos, petardos y alguna que otra piedra que impacta en los agentes.

El resultado: dos manifestantes detenidos, un bateeiro de Rianxo herido por un porrazo en el cuello por el que tuvo que ser trasladado al Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) y según manifestó la Subdelegación del Gobierno, dieciseis agentes con heridas leves por las que el Sindicato Unificado de Policía (SUP) ya ha avanzado que se personará como acusación particular contra los manifestantes.

Tras las detenciones, los bateeiros se trasladaron a las puertas de la Comisaría de la capital gallega para demandar la puesta en libertad de sus compañeros, que no se dio hasta ocho horas más tarde, concretamente a las 19:00 horas. Aunque todavía no han trascendido los cargos que se le imputan.

Reacciones políticas

Las protesta de los productores del mejillón tuvo pronto un fuerte eco político. En primer lugar, PSdeG y BNG hicieron suya la reclamación de los productores y demandaron la dimisión de Rosa Quintana, así como que Alfonso Rueda dé un paso al frente y en primera persona dirija las negociaciones para solucionar el conflicto.

Por su parte Francisco Conde, vicepresidente primero del Ejecutivo Gallego, realizó tras el Consello de la Xunta un llamamiento a la calma. No obstante, la cercanía de las elecciones y la ya dilatada trayectoria del conflicto hace que figuras de su propio partido como el alcalde de Vilanova de Arousa, Gonzalo Durán, demandara a los suyos, “que resuelvan esto de una puñetera vez”.

Cabe recordar que los populares arousanos realizaron la pasada semana una concentración de apoyo al sector mejillonero en el que ellos mismos portaban carteles que rezaban “no al decreto” en apoyo a una industria que en la Ría de Arousa genera cerca de 20.000 puestos de empleo directos.