Las llamadas al 112 se disparan en Galicia y superan el millón en tan solo un año

Los gallegos descolgaron el año pasado sus teléfonos más de un millón de veces para llamar al Centro Integrado de Atención ás Emerxencias-112 Galicia. Se trata de la cifra más elevada de los últimos siete años y, también, la interrupción de la tendencia a la baja que se venía registrando. Una mayor concienciación ciudadana es la principal explicación que da la Vicepresidencia Primeira de la Xunta , encargada de este servicio, al aumento de llamadas.

Los cada vez más comunes episodios de meteorología adversa y las emergencias que derivan de ellos, son también parte de la explicación a este aumento del número de avisos que recibe el 112. Esto se traduce, a su vez, en un incremento de las incidencias gestionadas, que mantienen una proporción similar a la 2022: una de cada cuatro llamadas acaban por convertirse en incidencias.

Las incidencias en las vías de comunicación son algunas de las más habituales, suponiendo alrededor del 20% del total, más de 54.000. Estas también incluyen caída de árboles o postes eléctricos que terminan en la carretera. Por su parte, en cuanto a los incendios urbanos se redujeron considerablemente, siendo 2.370, lo que supuso 120 menos que en el año 2022. Mientras, las fugas de gas se situaron en 131, una más que en el período anterior.

Destacan, asimismo, los avisos relacionados con la avispa velutina. Las gestiones para la retirada de los nidos que representaban un peligro real para la población fueron más de 12.000, la mayoría de ellas concentradas en los meses de verano.

Rescates

En lo que se refiere a los rescates u operativos de salvamento gestionados en el 112 Galicia aumentaron considerablemente, hasta llegar a los 788, una treintena más que el año anterior. Desde la Xunta, apuntan que se debe seguir trabajando para mejorar los sistemas de localización, a pesar de que ya se lograron mejoras, puesto que en 2023 el número de incidencias en las que se facilitaron las coordenadas alcanzó las 299, frente a las 97 del año anterior.

Los operativos para rescatar a personas en situación difícil continúan alcanzando su punto álgido en los meses de verano, al igual que los desaparecidos.