Alfonso Rueda ha realizado este martes su segundo discurso de investidura en menos de dos años (el primero fue en mayo de 2022 cuando sustituyó a Alberto Núñez Feijóo al frente de la Xunta). El presidente de la Xunta en funciones ha avanzado mínimos cambios en la composición del Gobierno gallego, con varios trasvases de competencias entre departamentos, y ha ofrecido a la oposición un pacto sobre industria y energía, ante la polémica por los nuevos proyectos.

En la primera sesión del debate para su investidura, estas han sido las principales novedades de un discurso que ha durado poco más de hora y media y que ha despertado las críticas de la oposición, por considerarlo "tremendamente decepcionante" y "falto de ambición", al que tendrán que responder en la jornada del jueves. Estas son algunas claves sobre los cambios en la estructura del nuevo Ejecutivo gallego: en primer lugar, en Presidencia se creará, bajo el amparo de la Asesoría Jurídica de la Xunta, una nueva dirección xeral de Asuntos Constitucionais, encargada según ha apuntado el candidato de “coordinar la defensa de la legislación autonómica ante el Estado”. Caso, por ejemplo, de la Lei do Litoral que fue recurrida ante el Tribunal Constitucional por el Gobierno de España.

La oposición ve en el discurso del candidato “falta de ambición” y “las promesas enlatadas de siempre”

Las responsabilidades de investigación científica, hasta ahora pertenecientes a Economía, pasarán a centralizarse en la Consellería de Educación, que cuenta también con las competencias sobre las universidades y los centros singulares de investigación “La ciencia debe ser uno de los elementos tractores de la Galicia del futuro y como tal contará con la máxima prioridad en la estructura del nuevo Gobierno”, señaló el líder popular.

Rueda, que ha mostrado siempre una especial preocupación por la diáspora gallega, “cuya pegada en el mundo es una parte importante de lo que fuimos y somos”, ha decidido que las competencias de Emigración pasen a formar parte del mismo departamento que las de Emprego, con la intención de mejorar la vinculación entre el retorno a Galicia y el mercado laboral de la comunidad.

Pacto por la industria

La oposición ha coincidido en considerar el discurso de Rueda como "tremendamente decepcionante", tanto la líder del BNG, Ana Pontón, como el portavoz socialista, José Ramón Gómez Besteiro, e incluso el único diputado de Democracia Ourensana, Armando Ojea.

A todos ellos, Rueda les ha ofrecido un pacto "por la industria y la energía", frente a las críticas que están recibiendo proyectos como el de la fábrica de fibras textiles de Altri en Palas de Rei, al que no ha mencionado en su discurso. Para Pontón esta supuesta "mano tendida" no es "un pacto, es una rendición" porque se establece en base a medidas ya adoptadas por la Xunta -como tramitar proyectos en un plazo máximo de un año o crear un fondo público-privado para impulsar iniciativas empresariales- por lo que ha exigido "un cambio de modelo" si Rueda quiere pactar.

Besteiro, por su parte, se ha mostrado más favorable a estudiarlo pero ha dicho que lo ve, en general, "poco concreto" y sería necesario "identificar" mejor las medidas. En todo caso, tanto los nacionalistas como los socialistas ya han anunciado que votarán en contra de la investidura de Rueda, cuando termine el debate el próximo jueves, y le han recriminado la "falta de impulso" y de proyecto, así como los cambios previstos en la Xunta que ven solo "cosméticos". 

El discurso en diez frases

Estas son las frases más destacadas que quedan de la intervención de Rueda:

1- Decidimos en las urnas y no en las redes, con papeletas y no con likes ni retuits.

2- El gallego no es propiedad de ninguna ideología, el gallego es un idioma extenso y útil, que forma parte de lo que somos y cuya utilidad va más allá de nuestras fronteras.

3- No vengo aquí para presentarme como salvapatrias, como reivindicador de causas personales o abanderado de posturas extremas. Ya hay demasiados y demasiadas así en la política.

4- Mientras por muchos lugares del mundo y de España galopa la discordia, nuestra tierra mantiene intactos los principios de la convivencia.

5- Eso fue lo que votaron los gallegos en estas elecciones autonómicas: hacer Galicia a la forma de Galicia.

6- No sería un buen presidente de Galicia si me desentendiese de futuro de España.

7- No nos equivoquemos, lo que está en juego no son los proyectos concretos de una o varias empresas: es el futuro de Galicia.

8- Cuando decimos que Galicia es el mejor lugar de España para formar una familia no es un eslogan publicitario ni chovinista. Es la constatación de que en nuestra comunidad hay calidad de vida.

9- El desafío que tenemos ante nosotros en esta legislatura no es ni más ni menos que la construcción de la Galicia de la próxima década.

10- Ninguno de los aquí presentes, y mucho menos el candidato a la investidura, puede interpretar el voto del pasado 18 de febrero como una carta en blanco para los próximos cuatro años.