Santiago
+15° C
Actualizado
sábado, 10 febrero 2024
18:07
h

Cárcel provisional sin fianza al presunto homicida de Chapela

La Policía cree que el sospechoso acudió al hogar de la víctima, a quien compraba pequeñas dosis de cocaína, para darle un ‘paleo’ // Ese día, supuestamente, acabó matándolo en dicha vivienda

Prisión provisional, comunicada y sin fianza para el detenido por el crimen de Chapela, actualmente investigado por un delito de homicidio. Así lo decretó este miércoles el Juzgado de Instrucción número 2 de Redondela (Pontevedra), cuya orden manda a la cárcel a este hombre que cuenta con antecedentes por violencia de género, amenazas, robo en interior de vehículo y narcotráfico.

El imputado se trata de un varón de 42 años de edad, es español y vecino del municipio de Chapela. Éste normalmente compraba droga a Roberto Peni, quien fue hallado muerto en su vivienda, también ubicada en este municipio pontevedrés, el pasado 30 de enero. Sus manos estaban atadas, cuando fue visto, y tenía un chaleco en la cabeza.

Conforme indicaron fuentes policiales, en una rueda de prensa que sucedió este miércoles, este sospechoso habría ido a casa de la víctima para darle un “paleo”, pero terminaría matándolo finalmente.

La intención del presunto homicida, que en un primer momento era robarle droga y dinero a ese vendedor, habría llegado tras sospechar que el camello tenía dos tipos de estupefacientes: uno que estaba más cortado y que supuestamente le estaba dando.

El presunto asesino vivía a un kilómetro escaso de la víctima, y fue a su casa, presumiblemente, el 27 de enero, según fuentes de esta investigación, que concluyeron que se abalanzó sobre él por detrás y de manera rápida para matarlo por sofocación tapándole la boca y la nariz. Tras ello, lo tiró al suelo en posición decúbito supino, lo amordazó y maniató y le echó por encima de la cabeza una cazadora, acción que conforme apuntan los investigadores denota arrepentimiento, lo que lleva a la teoría de que realmente no quería matarlo, sino que la cuestión “se le fue de las manos”. Posteriormente, el detenido salió y cerró la casa por fuera con las llaves de la propia víctima, las cuales posiblemente hizo desaparecer para ganar tiempo.

La Policía llegó al lugar, en la Rúa de San Telmo, número ocho, bajo, tres días después de los hechos y alertada por el 112 Galicia, con el que se puso en contacto la pareja de la víctima, que fue quien lo vio tras la ventana tumbado en el suelo del salón y posiblemente ya sin vida alguna.

ENCUENTRAN EL CUERPO Y VINCULAN EL HECHO. La dotación que acudió a la llamada tumbó la puerta y al entrar vieron al muerto amordazado y atado con cinta adhesiva de embalar.

Inmediatamente los agentes comunicaron el hallazgo y entraron en acción más unidades para proteger la escena del crimen, así como la Policía Científica y la Judicial.

Este entorno analizado indicaba que el hecho se habría producido sin apenas enfrentamiento físico entre víctima y agresor, ya que solamente había dos sillas tiradas, además del asiento del muerto.

Por ello, entre otras cosas, la Policía piensa que los dos se conocían y tenían un vínculo cercano, pues el hombre fallecido había permitido entrar al detenido en su hogar y ambos se sentaron a la mesa.

17 mar 2021 / 19:46
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
TEMAS
Tema marcado como favorito
Selecciona los que más te interesen y verás todas las noticias relacionadas con ellos en Mi Correo Gallego.