Educación, preparada para responder a un confinamiento o un cierre parcial

El conselleiro de Cultura, Educación e Universidade, Román Rodríguez, presentó ayer el Plan de Ensino Virtual ante a Covid-19, un documento que busca “regularizar, ordenar y estructurar la enseñanza a distancia”, prevista para el caso de que surja una cuarentena en un aula, un colegio o el confinamiento total de la población, como ocurrió en marzo pasado.

El objetivo es, aseguró, “adelantarse y estar preparados para actuar de inmediato en una hipotética situación de este tipo”, además de que “esta crisis sanitaria no se convierta en una crisis educativa y no interfiera en el derecho del alumnado a recibir una enseñanza de calidad y equidad”.

El conselleiro explicó que se trata de un sistema reglado y estable de docencia virtual para que el alumnado tenga unas rutinas similares a las de la enseñanza presencial, con tareas y evaluación del progreso del estudiante, manteniendo la interacción entre alumno y docente. Está dirigido a estudiantes de 3º de Primaria en adelante. En los niveles más bajos se emplearán opcionalmente las aulas virtuales, aunque, debido a la edad, “los expertos recomiendan centrar la enseñanza en otras actividades como tareas o deberes”, matizó.

El plan se estructura en cinco líneas de actuación: horario espejo, similar al de la docencia presencial; instrucciones inmediatas en caso de cierre o confinamiento; distribución de medios informáticos, según las necesidades; evaluación y control del alumnado, y, por último, acciones formativas para la enseñanza a distancia.

Para el horario espejo, cada centro elaborará un horario para la docencia a distancia similar al de la presencial. Este esquema tendrá que respetar la carga lectiva de cada asignatura y un mínimo del 60 por ciento se ha de centrar en la docencia virtual y el 40 % restante destinar a realizar tareas y actividades por parte del alumnado. Además, el plan contempla que se tienen que respetar los tiempos de descanso de los estudiantes.

La Xunta publicará en los próximos días una resolución para poner en marcha el documento y los centros deben elaborar en una semana este horario, que será supervisado y autorizado definitivamente por la Inspección Educativa.

simulacros Además de elaborar previamente el horario, el profesorado de cada área tiene que hacer simulacros con los alumnos para el uso de los medios de comunicación telemática en el caso de tener que acudir a la enseñanza a distancia. Los centros tienen también que analizar las necesidades de dispositivos electrónicos ante una hipotética situación de cierre, así como identificar al profesorado que necesite formación en esta materia, que la recibirá de inmediato por parte de los servicios de la Rede de Formación Permanente del profesorado.

En esta línea, Román Rodríguez recordó que en los últimos meses se pusieron en marcha acciones de formación dirigidas a los docentes sobre nuevas tecnologías y enseñanza mixta. Y aseguró que estas actividades continúan con 900 cursos en marcha y manifestó que entre el último trimestre del curso pasado y lo que va del actual se formaron 26.000 docentes.

El profesorado podrá impartir las clases desde su domicilio o el colegio a través de la plataforma de videoconferencia institucional o el aula virtual y tanto uno como otros –docente y alumnado– deben conectarse a la hora establecida en el horario.

COMUNICACIÓN a las familias El plan señala ante el confinamiento del alumnado que el mismo día del cierre la dirección debe enviar una comunicación a través de la aplicación abalar Móbil a las familias y publicar la noticia en la web del centro. Además, se habilitará, de inmediato, el aula virtual del centro con los recursos y actividades iniciales, además de trasladarle orientación a las familias.

También se contempla una evaluación del trabajo realizado, que incluye una sesión de tutoría para los alumnos y otra para las familias. La Jefatura de Estudios de cada centro requerirá al profesorado al final de cada semana las actividades realizadas en el horario establecido.

La modalidad virtual contempla también el control de asistencia de los alumnos por parte de los docentes utilizando los canales habituales.

De cualquier manera, el conselleiro apeló a que los centros sigan “en alerta” ante posibles brotes de covid e incidió en que los colegios e institutos “no son lugares de transmisión” del virus.