Especialistas del Sergas abordan el crecimiento de los pacientes frágiles

Santiago. La población gallega es quebradiza. Así lo atestiguan los datos que la pasada mañana se expusieron en el foro de debate organizado por la Fundación Bamberg en la capital gallega, donde expertos en el estudio y atención de los llamados pacientes frágiles coincidieron en alertar sobre el crecimiento de los casos y, de su mano, de los gastos sanitarios ocasionados.

En el evento, que ha contado con el apoyo de las farmacéuticas UCB y Amgen, participó el Sergas, a través de su gerente y del director general de Asistencia Sanitaria, quienes expusieron el plan de actuación gallego para paliar un problema que, por un lado, afecta especialmente a su población por su elevado grado de envejecimiento y, por otro, se ha agravado en los últimos dos años a causa del sedentarismo que trajo la pandemia.

Una realidad que queda de manifiesto en los datos aportados por el presidente de la Fundación Bamberg, Ignacio Para Rodríguez-Santana, que destacó en su intervención el hecho de que Galicia es la segunda comunidad con el índice de envejecimiento más elevado, al haber el doble de personas que son mayores de 64 años que de menores de 16 (202 por cada 100).

Asimismo, Rodríguez-Santana subrayó que en el conjunto de España se producen alrededor de 200.000 fracturas al año debido a esta fragilidad ósea, lo que supone un gasto de 3.000 millones de euros. Cifras ambas, dijo, que se verán incrementadas en un 30% en el horizonte de 2025 debido a los efectos perniciosos de la pandemia del covid-19, tanto los derivados de la propia enfermedad como a causa de la falta de movilidad.

Datos en los que insistió el presidente de la Fundación Bamberg en la comida de trabajo en la que se continuó con el debate iniciado por la mañana en la Facultad de Medicina, en este caso en presencia del conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña.

En esta línea, el responsable sanitario explicó algunos de los proyectos puestos en marcha por su departamento para la coordinación entre los servicios de Atención Primaria y Atención Hospitalaria, al tiempo que habló de la necesaria colaboración de la población objetivo (personas de más de 65 años) “porque el paciente debe participar activamente en la toma de decisiones y corresponsabilizarse de su proceso”. r. ponte