Fumata negra todavía entre la plantilla y los directivos de Alcoa

El comité de empresa y la dirección de Alcoa tendrán una tercera cita este martes para tratar de alcanzar un acuerdo que permita la desconvocatoria de la huelga indefinida que comenzó en el complejo industrial de San Cibrao, en Lugo, a principios de octubre. Las partes fueron incapaces de llegar a un entendimiento ayer tras horas de reunión telemática.

La reunión comenzó a las diez de la mañana y continuó por la tarde, después de un receso a mediodía, hasta que pasadas las 18:00 horas el comité de empresa comunicó que el encuentro terminó y que las negociaciones proseguirían la siguiente jornada.

“Volveremos a sentarnos a negociar a las nueve de la mañana. Hemos hecho una última propuesta, para intentar desbloquear la situación, que está muy bloqueada”, reconoció el presidente del comité de empresa, José Antonio Zan, en declaraciones a los medios tras la reunión.

Acompañado por otros miembros del comité, Zan insistió en que la propuesta de la representación de los trabajadores incluye “suspender la huelga”, a cambio de una serie de condiciones que Alcoa debería cumplir para llegar a esa paz social.

A cambio de la desconvocatoria, que según cálculos de la multinacional ya habría provocado más de diez millones de euros en pérdidas –pues no se permite la salida de aluminio de la fábrica de San Cibrao– “Alcoa se sentaría a negociar” la venta de la factoría a la SEPI y también “se comprometería por escrito a no parar ninguna de las series”.

Además, dijo Zan, “mantendría el personal para la producción diaria y el mantenimiento de las instalaciones”.

La reunión telemática que ambas partes celebraron el pasado jueves día 7 también terminó sin que se cerrase un acuerdo para suspender la huelga indefinida, condición que la multinacional pone para reiniciar la negociación de cara a una posible venta de la planta mariñana.