Galicia ve una amenaza latente en toda Europa
A medida que avance la sexta ola por España, más territorios se irán sumando progresivamente a la lista de comunidades cuyos viajeros deben cumplimentar el registro obligatorio una vez lleguen a Galicia. La Rioja y Canarias han sido las últimas autonomías en incorporarse, tras la actualización del Diario Oficial de Galicia (DOG) publicada a primera hora de este martes.
Se suman así a Aragón, Baleares, Cataluña, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Madrid, Murcia, Navarra y País Vasco, que ya estaban presentes en el listado en semanas anteriores. De este modo, son ya once de diecisiete (el 65 %) las comunidades españolas incluidas.
Pero, lo que más llama la atención de esta última actualización es la inclusión de prácticamente toda Europa en el listado. Y es que es tan delicada la situación en el resto del continentes (con Austria rozando los 1.400 casos por cada cien mil habitantes de incidencia a catorce días; República Checa, los 1.200; y Bélgica por encima de los mil), que todos los países están considerados como zonas de riesgo por el DOG, a excepción de Malta y El Vaticano.
LAS RESTRICCIONES VUELVEN A SER EL PAN DE CADA DÍA EN MUCHOS PAÍSES. Sin ir más lejos, la Comisión Europea calificó al inicio de la semana de “frágil” la situación epidemiológica de la pandemia del covid en Europa. Así las cosas, muchos países ya han regresado a las restricciones. Austria, el territorio más afectado, con una incidencia de 1.397 ya ha dictado una orden de confinamiento para los cerca de dos millones de ciudadanos mayores de doce años que no están inmunizados, una medida inédita ante la baja tasa de vacunación: falta un 35 % por inocularse.
Las restricciones regirán, al menos, hasta el 24 de noviembre. Los ciudadanos no vacunados solo podrán salir de sus viviendas para determinados fines, como satisfacer necesidades básicas, ir al médico o a los centros de vacunación, o pasear y hacer ejercicio al aire libre. También pueden ir al trabajo, siempre y cuando presenten allí cada día un test PCR negativo que no debe tener más de 48 horas.
En Rusia, con 385 de incidencia, las autoridades ya discuten la posibilidad de introducir pases sanitarios obligatorios para acceder a lugares públicos y al transporte, para frenar la expansión del covid, después de cumplirse el séptimo día consecutivo con más de 1.200 muertes.
En la misma línea, en Alemania, que registra 527 casos por cada cien mil habitantes, los tres partidos que negocian la futura coalición del Gobierno se mostraron de acuerdo con imponer una serie de restricciones para los no vacunados y afrontar el recrudecimiento de la situación en un país con las tasas de vacunación más bajas de Europa: el 67,5 % de la población con pauta completa. El acuerdo incluye medidas para la reducción de contactos y la exigencia de tener un certificado de vacunación o un test negativo para subirse a un medio de transporte público.
En Francia, con una incidencia controlada por el momento en 180 casos, y donde las escuelas ya habían recuperado la total normalidad, sin necesidad de que los alumnos llevasen mascarilla en clase, han tenido que dar marcha atrás, y volver a exigirla. Además, la pasada semana, el presidente, Emmanuel Macron, pidió a los mayores de 65 años y a las personas con factores de riesgo que todavía no lo han hecho, que se pongan la tercera dosis. De hecho, para los ancianos, esa dosis adicional será imperativa para que tenga validez su certificado covid, que en Francia es necesario para ir al cine, al teatro, a un estadio e incluso para tomar algo en un bar.
Por el contrario, en Reino Unido, con 756 casos por cada cien mil habitantes, el primer ministro, Boris Johnson, dijo este lunes que no ve la necesidad de planear las restricciones a pesar del fuerte incremento de las infecciones en otros países europeos. “No vemos nada en los datos en este momento que sugiera que necesitamos pasar al plan B (restricciones). Nos mantenemos en el plan A”, declaró. El país levantó las restricciones al final de julio.