Galicia y Asturias refuerzan sus lazos ante retos comunes para ganar competitividad

El I Gran Foro de la Competitividad del Noroeste, cónclave convocado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) en colaboración con el Igape y el Círculo Financiero de Galicia, en el marco del proyecto Capacita Directivos, certificó este miércoles que Galicia y Asturias son mucho más que autonomías vecinas. Administraciones, empresas, colectivos patronales y ejecutivos ponían en común sus puntos de vista ante el nuevo escenario de recuperación económica que se abre tras la pandemia y sobre el papel clave que se jugará desde el tejido productivo, con la competitividad y sostenibilidad como objetivos.

En este contexto, la digitalización, la transición ecológica y la reindustrialización constituyen los tres pilares alrededor de los cuales se articula la inversión de los Fondos de Recuperación de la UE. Abrían una sesión que duró por encima de las cuatro horas José María Arias, presidente de APD en la zona noroeste, y Pablo Junceda, titular de APD en Asturias, director general de Sabadell Gallego y subdirector general del Grupo Sabadell.

Tras la bienvenida, Arias Mosquera ponía el acento en los cambios en el modelo productivo que vinieron a ser acelerados por la COVID, y ponía el foco en un tema de candente actualidad: el impacto creciente del coste de la energía en los balances de las empresas de todos los sectores, que debe ser corregido para evitar que Galicia, Asturias y el resto de España pierdan cualquier posibilidad de competir con sus vecinos.

Junceda asentía. En el transcurso de la jornada, que calificó de “magnífica” –al aforo presencial en el hotel coruñés Attica 21 se sumaron más de trescientas personas vía online–, instó a reforzar la vinculación “de dos comunidades tan cercanas, que tienen tanto en común, las buenas cosas y también aquellas que tenemos que mejorar”. Tras señalar que ve a la Xunta y al Gobierno del Principado proactivos para estrechar esos lazos, alegó que “juntos somos más grandes, más potentes y tenemos mayor capacidad; y es que entre A Coruña y Oviedo o Gijón, sin pasarse de velocidad, hay dos horas y cuarto” por carretera, alegó.

En la cita tanto el vicepresidente segundo y conselleiro de Economía, Empresa e Innovación, Francisco Conde, como su homólogo asturiano, Enrique Fernández, consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica, recogieron este guante, coincidiendo en los retos comunes.

La competitividad del Noroeste pasa, según Conde, por que el Gobierno desbloquee la situación que sufre la industria hiperelectrointensiva, con empresas como Alcoa y Alu Ibérica –tanto en A Coruña como en Avilés–, así como establecer un marco eléctrico competitivo que ponga fin al desfase de precios con respecto a otros países europeos. Porque no se puede perder la capacidad de producir aluminio primario en España.

Desde Galicia se pide al Ejecutivo central un compromiso firme con el Corredor Atlántico “para ampliar las capacidades logísticas de los sectores industriales del país”, algo que el responsable socialista de Industria asturiano ve ya en vías de mejora, aunque los dos reclaman mayor peso de las comunidades en ámbitos de vital relevancia, como el futuro de la eólica marina. No se olvidan del crac demográfico y la despoblación al medio rural, dos grandes males compartidos.

Conde señalaba que el Noroeste tiene los recursos, la capacidad instalada y el conocimiento necesarios para desarrollar proyectos de referencia en el ámbito de la digitalización y la sostenibilidad, y teniendo como aliados a los fondos europeos Next Generation y a la colaboración público-privada.

“Creo que esta es una oportunidad para poner en común proyectos y, sobre todo, visiones compartidas de como a través de la colaboración entre las propias comunidades autónomas podemos impulsar iniciativas que puedan fortalecer nuestro tejido productivo y atraer nuevas inversiones”, destacó el vicepresidente de la Xunta.

Tanto Galicia como Asturias destacan las oportunidades que van a suponer los fondos europeos: la candidatura gallega recoge 355 proyectos que alcanzan una inversión de 20.000 millones, la asturiana 195 iniciativas por 6.500 millones. El objetivo copartido es la reactivación económica y la competitividad del arco atlántico. Conde instó al Gobierno central a primar la igualdad y la cohesión social y territorial en un reparto transparente, garantizando la igualdad de oportunidades de las comunidades autónomas.

Enrique Fernández, por su parte, apostaba por una colaboración que siempre ha existido con Galicia en el pasado, en el presente y que habrá en el futuro. “Dice el dicho popular que gallegos y asturianos somos primos y hermanos” aseguraba, con mucho más que nos une que lo que nos separa, y un dato de las “pobladas embajadas” que supone el hecho de que “son 21.000 los gallegos que residen en Asturias, y unos 17.000 los asturianos con residencia en Galicia”.

Visión patronal

María Calvo, vicepresidenta de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), instaba desde este foro a desarrollar más proyectos conjuntos, citando el éxito que supuso que el Corredor Atlántico de mercancías se incluyese, gracias al trabajo y presión de todas las comunidades del noroeste, en la red troncal de infraestructuras de la UE. Juan Manuel Vieites, titular de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), recogía también el guante de quien en dos meses podría ser la primera presidenta de la patronal asturiana.

El también secretario xeral de Anfaco aseveró que “en la CEG entendemos que el principio de asociación debe jugar un papel fundamental; la participación activa en la planificación de todos los instrumentos a través de los que se canalicen durante los próximos años los recursos que la UE pondrá a disposición de las empresas será fundamental para que respondan a las necesidades reales de nuestro tejido productivo y puedan ser aprovechados por éstas”.

Apuntó Vieites que “desde la CEG trabajamos a día de hoy intensamente en ello y así seguiremos durante los próximos meses, participando a través del Diálogo Social en la configuración de los proyectos que desde Galicia debamos promover para su financiación por el Plan de Recuperación y Resiliencia, colaborando también en los Comités de Seguimiento de los Programas Operativos (FSE y FEDER) vigentes y en los que se incorporan los Fondos REACT EU, así como en el diseño de los Programas Operativos que articularán las medidas a desarrollar durante el período 2021-2027”.

“De esta forma la patronal gallega apuesta firmemente por apoyar a las empresas de Galicia en esa transformación en clave de mayor competitividad, y por supuesto, por la colaboración codo con codo con la administración en crear condiciones que favorezcan dicha transformación”, finalizó.

Mesas y diálogos

A continuación, Antonio Fernández, responsable financiero de Greenalia, abordó con Adriano Mones, presidente de la Asociación empresarial para el Desarrollo e Impulso del vehículo eléctrico (Aedive), y Oriol Sarmiento, gerente del Clúster de Energías renovables de Galicia (Cluergal) el porvenir de la movilidad y la energía. Norberto Penedo, director del Área de Competitividad del Igape, abordó la competitividad, reindustrialización e industria conectada junto a Teresa Ramos, directora general en Actega Artística, y Carlos Pajares, su homólogo en TK Escalator Norte. Y sobre el impacto de la tecnología en este proceso dialogaron Pedro Regojo, socio de Garrigues, Pablo Priesca, presidente de la Fundación CTIC, y Constantino Fernández, presidente de Altia.

La encargada de la conferencia de cierre, que llevó el título ‘La internalización como palanca de la competitividad’, fue María Peña, consejera delegada del ICEX.