La Asociación Eólica de Galicia demanda que los 23 millones anuales que abona el sector se destinen sólo a municipios afectados por los parques
Insiste en que, además, los propietarios de los montes reciben 11 millones de euros por el arrendamiento de las tierras para la instalación de aerogeneradores
La Xunta de Galicia informó, tras la celebración del Consello del 13 de enero, del destino y cuantía del Fondo de Compensación Ambiental (FCA), fondo que se nutre del canon eólico que abonan los promotores de esta energía limpia y renovable, cuya cantidad asciende cada ano a 23 millones de euros. En este contexto, la Asociación Eólica de Galicia (EGA) demanda una vez más que el destino del canon repercuta “exclusivamente” en los ayuntamientos afectados por los parques eólicos, ya que la Xunta de Galicia lo “extiende” a otros, tal como se puede comprobar en la información difundida por el Gobierno gallego.
Desde 2010, año en que se puso en marcha el FCA, nutrido por el canon eólico, la Xunta invirtió “más de 108 millones de euros en 2.300 proyectos”, según indica la entidad gubernamental. “Si es una compensación para los territorios donde se han instalado parques o se han visto afectados por su instalación (líneas de evacuación), a sus correspondientes municipios debe ir íntegramente el producto de este impuesto”, según advierte EGA. “Igualmente, conviene recordar siempre que somos el único sector empresarial que sobrelleva un impuesto específico además de todos los que está obligado a pagar. Ni las minas, ni las compañías del ciclo integral del agua, ni los bateeiros soportan un impuesto a mayores de los propios derivados de la actividad empresarial. Y generamos energía verde, no contaminamos”, concluye la entidad.
Por otra parte, EGA defiende “desde siempre” la conciliación del sector con el medio rural, poniendo como “ejemplo palmario” la anuencia de propietarios y municipios durante los últimos 25 años, momento en que comenzó el desarrollo eólico en Galicia, logrando “liderar” en Europa el despliegue de esta tecnología. “A los propietarios de los montes donde se instalaron parques, ubicados en un centenar de ayuntamientos, se les abonan anualmente más de 11 millones de euros en concepto de rentas. Es el mejor rendimiento que se puede obtener, por encima del uso agrario o forestal. De ahí su satisfacción”, tal como explica la entidad que agrupa a los promotores eólicos gallegos.