La ayuda para luchar contra la pandemia marca el 85 aniversario de Amancio Ortega

Este domingo Amancio Ortega, fundador de Inditex, cumple 85 años. Será el segundo aniversario bajo las restricciones de la pandemia del coronavirus para el empresario natural de Busdongo de Arbás, en León, pero que se crió en Galicia y en la actualidad es un insigne coruñés. Este año no volverá a ser noticia, por tanto, por las grandes celebraciones sorpresa organizadas por su hija, Marta Ortega, y sí por la contribución que tanto la fundación que lleva su nombre como la compañía textil líder de la moda mundial han realizado para contribuir a reforzar la lucha contra la COVID-19. De hecho, en la reciente presentación de resultados del grupo conocíamos que para contener los efectos de la crisis sanitaria, se activó un programa global de emergencia de inversión en la comunidad al que se destinaron más de 40,4 millones de euros y que permitió movilizar más de 177 millones de unidades de material sanitario y de primera necesidad.

No dudaron ni Amancio Ortega ni Pablo Isla, presidente de Inditex, en poner a disposición de las administraciones públicas y donantes privados toda su capacidad logística y recursos. Esas más de 177 millones de unidades de material prioritario viajaron hacia España en un total de 66 vuelos: 2.300 respiradores, 2,8 millones de mascarillas N95/FFP2, más de 120 millones de mascarillas quirúrgicas, casi 44 millones de guantes, 425.000 pantallas faciales, 540.000 buzos protectores, 1,5 millones de batas quirúrgicas, 350 camas hospitalarias, 1,9 millones de test y 17 robots para acelerar su procesamiento.

Sólo la empresa fundada por Ortega destinó en este sentido 24,6 millones de euros. Además se produjeron en las fábricas del grupo más de 140.000 batas sanitarias impermeables que fueron distribuidas en proximidad a través de las autoridades autonómicas, y la compañía donó 31.000 artículos de la colección textil-hogar de Zara Home (mantas, sábanas y almohadas) a centros sanitarios y albergues de personas sin hogar; y más de un millón de prendas para personas sin recursos. Estos productos fueron distribuidos, principalmente, a través de distintas organizaciones con las que el Grupo mantiene colaboraciones estables, tanto entidades sin fines lucrativos como Cruz Roja o Cáritas, como organismos públicos como el Ayuntamiento de A Coruña, la Xunta de Galicia o IFEMA/Comunidad de Madrid, entre otros.

Esa solidaridad marca el 85 cumpleaños de Amancio Ortega, hijo de un ferroviario y una ama de casa que, a pesar de ser el hombre más rico de España –incluso tras el impacto económico de la pandemia– mantiene una vida sencilla. Un emprendedor y empresario hecho a sí mismo que comenzó de forma muy temprana su vida laboral, con apenas 12 años, vinculado ya al mundo textil, que en 1963 creaba Confecciones Goa y que una década después inauguraba el primer Zara en A Coruña. En 1985 nacía Industrias del Diseño Textil, Inditex, y el resto ya es historia de la moda mundial, en un movimiento que ganó intensidad con su salida a Bolsa el 23 de mayo de 2001. Pronto se cumplirá el veinte aniversario de la compañía en los parqués. En julio de 2011 Ortega cedía a Pablo Isla la presidencia ejecutiva del grupo, aunque ahí sigue, a diario, ayudando a marcar el paso de la compañía que gestó.