La escasez de agua también preocupa en la lucha contra los incendios forestales

A pocas semanas de la entrada en el mes de julio y con él, del arranque de la campaña de alto riesgo de incendios forestales, empieza a preocupar cómo puede afectar la sequía y la falta de agua en los embalses a la lucha contra el fuego. En la actualidad, los embalses se encuentran al 54,6 % de capacidad, y algunos en cifras aún inferiores, cuando el año pasado, por estas fechas, estaban al 69,3 %.

El conselleiro de Medio Rural, José González, admitió ayer, cuando se le preguntó por los efectos de la sequía en la lucha contra los incendios, que hay “una cierta preocupación” porque “se va a tener que disponer de ese agua especialmente para que puedan trabajar los hidroaviones”, aunque afirmó también que en Galicia “estamos suficientemente preparados” para afrontar otra campaña antiinendios.

Tras precisar que en el ámbito de agricultura y ganadería no han advertido por ahora “dificultades”, González apeló a la responsabilidad tras recordar que todos los indicadores dicen que “puede haber dificultades este verano desde el punto de vista del abastecimiento”.

Por el momento, informó Efe, se ha procedido a mantener los puntos de agua y “se construyeron” otros nuevos. Con todo, ha confiado en que “la situación mejore”, no sin insistir en que Galicia está “suficientemente preparada para las dificultades que puedan venir”, con un amplio despliegue conformado por 7.000 efectivos para combatir a lo largo de este verano los incendios forestales. . González insistió en que el objetivo del Gobierno gallego sigue siendo “que haya menor número de incendios y de hectáreas afectadas”.

José González visitó el nuevo centro de coordinación provincial del servicio de prevención de incendios forestales de Ourense, al cual la Xunta destinó 100.000 euros, con la finalidad de mejorar la operatividad. Dicho centro estará dotado con zonas de reuniones, disponibilidad a videoconferencias y acceso a toda la información operativa disponible, para de este modo reaccionar de forma más eficaz e inmediata ante cualquier situación de emergencia, informó Medio Rural.

Mejoras tecnológicas. Las mejoras tecnológicas introducidas permiten desplegar de forma más óptima las nuevas fuentes de información de las cámaras y del vídeo en tiempo real de las aeronaves y bases aéreas de la Rede de Vixilancia de Espazos Forestais.

“Se trata de mejorar la seguridad y la eficacia de las operaciones de incendios de complejidad avanzada, para gestionar con mayor eficacia los medios desplegados y las labores de extinción” declaró el conselleiro.

A este respecto, se habilitará un equipamiento profesional que consta de 10 pantallas de 65 pulgadas, que serán ubicadas en el panel frontal de la sala de control.

“Incrementamos las cámaras hasta 148 y eso nos permite poder decir que tenemos cientos de ojos puestos sobre el territorio, tanto para prevenir los incendios forestales, sino también para advertir a los incendiarios que en el caso de que sean detectados a través de las cámaras, caerá sobre ellos todo el peso de la ley”, añadió González.

Mando operativo. Estas actuaciones se enmarcan en el Plan de prevención e defensa contra os incendios forestais de Galicia –Pladiga 2022–. Una de las novedades de este año es la creación del Sistema Estructural de Mando Operativo se prevén mejoras en la seguridad y actuación en aquellos incendios de complejidad avanzada, así como en la organización y coordinación operativa del servicio.

Así mismo, también se busca liberar de tareas secundarias al director técnico de extinción y establecer una sectorización, en caso necesario, de cada incendio, para de este modo, gestionar con mayor eficacia los medios desplegados y las labores de extinción.

El conselleiro remarcó el esfuerzo de los profesionales que trabajan para defender los montes gallegos de los incendios. En concreto, 7.000 trabajadores que tienen a su disposición más de 30 aéreos proporcionados por la Xunta y el Estado, así como cerca de 400 motobombas.