La jueza no se arreda y procesa a toda la banda de Santórum
Les impone una fianza récord de 500 millones por las cuatro toneladas de cocaína del ‘Karar’
Los quince marineros del MV Karar y los dieciséis miembros de la banda de lancheros arousanos liderados por Juan Carlos Santórum Navazas recibieron ayer el auto judicial de la magistrada Marisol López Martínez, en el que se les notifica su procesamiento como dueños de las casi cuatro toneladas de cocaína que se incautaron a bordo de esa embarcación el 25 de abril de 2020, justo cuando toda Galicia estaba confinada por la pandemia del COVID.
La jueza no se arredó ante la decisión de la Audiencia de Pontevedra que en su día ordenó la puesta en libertad de la mayoría de los encausados (excepto los que viajaban a bordo del buque con la droga) al considerar que no había suficientes motivos para que los lancheros, que se iban a encargar de alijar la coca, almacenarla y transportarla, permanecieran en prisión.
Las nuevas investigaciones llevadas a cabo por el grupo Greco Galicia permitieron consolidar la acusación y este 8 de febrero dicto el auto de procesamiento de todos ellos por delitos contra la salud pública y les insta a que depositen una fianza de 500 millones de récord “para asegurar las responsabilidades pecuniarias que pudieran imponérseles” en caso de ser condenados en la vista oral.
La lista la encabezan el presunto líder Juan Carlos Santórum Navazas y sus dos lugartenientes Emilio Xosé Rodríguez Castro, Ricardo Santórum Navazas, y Braulio Vázquez Vázquez. Además estaban el empresario del sector náutico Fidel Fernández Barroso, junto Sergio Fontao Olveira, José Yamandú Reboiras Gondar, los hermanos Pablo y Marcos García Villadamigo, Ismael Cores Barreiro, José Ramón Maquieira Rodil, junto a José Manuel Blanco Gestido, el único gallego que viajaba a bordo del mercante como garantía ante los cárteles caribeños. El resto son los marineros de Nepal y Bangladesh que tripulaban la embarcación y que habían cargado la cocaína en Colombia.
La relación de imputados se completa con el funcionario presuntamente corrupto del SVA, Pablo Suárez Vázquez, su mujer Mónica Fernández Landín y el colombiano René Robledo, el hombre del cártel en España, apresados en Madrid en el mes de junio cuando el aduanero recibía más de 300.000 euros con destino a Juan Carlos Santórum. Al funcionario público le acusa de “un delito de infidelidad en la custodia de documentos y revelación de secretos, en concurso con un delito de cohecho y un delito de encubrimiento, amén de integración en organización criminal de narcotráfico, así como un delito de blanqueo de capitales”, según consta en el auto contra el que se puede presentar recurso de reforma. De todos los procesados solo los tripulantes del Karar permanecen en prisión.
En este auto se revela que “las captaciones de comunicaciones autorizadas judicialmente permitieron conocer que Juan Carlos Santorum Navazas contaba con colaboradores integrados en el Servicio de Vigilancia Aduanera, que le proveían de información sobre el control policial de sus actividades y colaboraban con él en su actividad de comercialización de estupefacientes, en concreto de unos paquetes identificados con un sello impreso con las siglas ONG”. Fue el detonante para que el Fiscal antidroga de Pontevedra pidiera a la jueza el procesamiento de todos los implicados tanto por un delito contra la salud pública como el de pertenencia a banda armada”.
··· En una de las escuchas se detectó que Santórum le decía a su socio Braulio iba a salir él en una planeadora.
“Si acaso saliera yo en la pequeña, en caso de ir yo en esta roja por cualquiera burrada ¿sabes? y hubiera un marrón criminal hubiera cualquiera rollo, tu sabes donde es el sitio aquel de Muros, en Esteiro donde miramos allí, me subo allí, y os meto la mercancía en el monte o allí en la cueva aquella y después la vais a coger, si hubiera una marronada criminal y sabes y no tuviéramos comunicación ni ninguna mierda o cualquier cosa yo sí puedo sacar algo de mercancía la echo allí”.