La ocupación de viviendas de uso turístico resiste ante la covid-19

Las posibilidades para pasar el verano en Galicia son muy variadas y los veraneantes pueden escoger entre las 14.932 opciones que recoge el Registro de Empresas y Actividades Turísticas (REAT) de Turismo de Galicia.

Este organismo publica cada mes las estadísticas sobre esta oferta en la comunidad. Así, los lugares contabilizados en julio se repartieron de forma desigual entre las provincias. La mayor cantidad correspondió a Pontevedra (6.413), seguida de A Coruña (5.499), Lugo (2.253) y Ourense (767).

De este cómputo, destacan los 11.129 domicilios de uso turístico –que constituyen el 74,53 por ciento del total–.

Las viviendas de uso turístico registraron un índice de ocupación del 68% en la comunidad gallega durante el mes de julio. Los datos manejados por la asociación que representa a los propietarios de este tipo de alojamientos, Aviturga, reflejan sin embargo un porcentaje muy desigual en función de los destinos. Así, mientras hubo zonas que rozaron el 80%, la ocupación en las grandes urbes como A Coruña, Vigo o Pontevedra se resintió de forma evidente.

La suma de la ocupación en julio registró un retroceso de tres puntos con respecto a julio de 2019, mes en el que las viviendas superaron el 71%.

Aviturga vincula este descenso con el escaso movimiento registrado durante la primera quincena del mes, muy próxima al inicio de la desescalada y un momento en el que la incertidumbre desincentivó los traslados por ocio o descanso.

mención especial para sanxenxo Municipio a destacar es Sanxenxo, que concentra 1.800 de las más de 11.000 viviendas de uso turístico registradas en Galicia. Desde Aviturga destacan que el destino fue capaz de retener a sus incondicionales y de atraer a nuevos visitantes, aunque desde la asociación matizan que este pasado mes fueron zonas del litoral sanxenxino las que despertaron más interés entre todos los viajeros.

“En general las viviendas unifamiliares, sobre todo si ponen a disposición de los huéspedes piscina u otras prestaciones de ocio sin necesidad de salir de la propiedad, son las primeras que se reservan. Esta tendencia es común en toda Galicia y dentro de esta preferencia comprobamos como las zonas rurales, tanto de municipios tradicionalmente visitados como de destinos emergentes, están haciéndose un hueco en el mercado”, explica Dulcinea Aguín, presidenta de la asociación.

las decisiones del viajero La estancia media de los viajeros en destinos turísticos tradicionales no superó los tres días, mientras que los que optaron por viviendas aisladas prolongaron su estancia en el alojamiento a siete días de media.

Dulcinea Aguín insiste en que Galicia debe aprovechar esta oportunidad y adelantarse a las demandas de los viajeros. “Nuestros asociados tuvieron ocasión de comprobar este mes cómo sus huéspedes les demandan información del entorno. Incluso los que optaron por destinos de costa buscando disfrutar de la playa, este año complementaron ese recurso turístico con un afán por descubrir nuevas rutas y nuevos recursos”.

En lo referente a la procedencia del huésped en julio, Asturias, País Vasco y Castilla y León fueron las comunidades desde las que llegaron la mayoría, junto a un importante movimiento interprovincial en Galicia. En gran parte de los casos, se trató del primer viaje a la comunidad, “a la que acudieron atraídos por una imagen de escasa masificación, de seguridad y de diversidad turística”.

Y aunque la tendencia ya se venía consolidando en los últimos años, dicho mes se caracterizó sobre todo por la reserva de última hora, ya que tanto huésped como propietario viven la temporada de verano muy pendientes de la evolución de la covid-19.

Algo coincidente con el pasado verano es el perfil del usuario de las viviendas para alojamiento vacacional. Se trata de familias integradas por entre 2 y 4 miembros y procedentes en su mayoría del territorio nacional. “Personas que buscan un descanso basado en la tranquilidad y que valoran especialmente el precio y la comodidad que le ofrece una vivienda de uso turístico frente a un establecimiento hotelero”, según Aviturga.

De esta manera, la presidenta de la asociación destaca la importancia de cuidar los alojamientos y ofrecer una buena relación calidad- precio a los turistas.