La vida en la costa, deseada por muchos, se muestra inalcanzable para la mayoría

Tras dos años, donde el covid condicionó nuestras vidas para siempre, parece que estamos volviendo a la normalidad en todos los aspectos. El fin de las restricciones en todo el territorio nacional, reactivó el sector inmobiliario costero, que si bien no estuvo muy afectado, sí que perdió mucho valor. Con todo, este año recuperó el nivel de antes de la pandemia y, en algunos lugares, lo superó con creces.

Según el informe elaborado por Tinsa, un grupo de valoración y data inmobiliaria, el 51 % de los 280 municipios costeros analizados, recuperaron su nivel de actividad de compraventa del año 2019. Una buena señal de la recuperación económica que necesitan estas localidades que viven del turismo de playa.

Pero esta no es la única buena noticia para este sector, puesto que el 86 % de los municipios, en este primer trimestre, registraron un subida en el precio de la vivienda. En este sentido, destacaron las islas, con un incremento superior al 16 % respecto al nivel del último año prepandemia. Por su parte, la costa atlántica andaluza creció en los indicadores de compra y construcción, con un 28 % más de compraventas en 2021 que en el año 2019.

Estas subidas se pueden achacar a las ganas de las personas de hacerse con una primera o segunda residencia en una zona costera y de la escasez de viviendas que cumplen estas características específicas.

El informe Vivienda en Costa 2022, que divide el litoral español en 63 zonas, recogió el precio de la vivienda nueva y usada en cerca de los 300 municipios analizados. Además, como novedad, este año cuantifica el valor promedio de la vivienda en el litoral de cada provincia y, gracias a la aportación de su red de técnicos, profundiza en el segmento de segunda residencia para incluir, por primera vez, una referencia específica sobre el valor del producto vacacional en cada provincia, así como la distancia que lo separa de los precios medios de la vivienda terminada –nueva y usada– en su zona.

Tendencia al alza, tanto en el precio como en la demanda. En cuanto a los precios de las viviendas, el dossier muestra una tendencia alcista en todos los litorales, con unas variaciones interanuales entre el 3 % y el 9 % en el primer trimestre de 2022, y unos incrementos respecto a 2019 de entre el 4 % y el 16 %, con las islas registrando los mayores aumentos con un precio medio de 1.852 €/m2. La zona norte, por su parte, presenta el valor medio más reducido, situándose en 1.645 euros por metro cuadrado.

Si nos fijamos en los precios de la vivienda de segunda residencia, los resultados del informe elaborado por Tinsa muestran que en un tercio de las zonas, el precio de los municipios con línea de costa se sitúa por encima del valor medio de la provincia. Esta situación refleja el importante peso que tiene este tipo de viviendas en los mercados inmobiliarios provinciales.

Además, los precios de las segundas viviendas en la costa crecen por encima de los de la primera, en el 61 % de los casos. Un dato que muestra la tendencia a tener un segundo domicilio donde poder disfrutar del clima y de la playa.

Asimismo, Vivienda en Costa 2022 recoge un importante incremento en los precios de obras nuevas, llegando al 90 %, y en las de segunda mano, que experimentaron una subida del 88 %. Esto supone un cambio con respecto al año pasado, pues en las viviendas usadas, la tendencia general era de estabilización.

En relación a la demanda, también ofrece una tendencia alcista. De acuerdo con el dossier, en el 2021, se registraron 674.000 transacciones de compraventa a nivel nacional. Esto supuso un incremento respecto a los niveles de 2020 y 2019, + 38 % y + 18 %, respectivamente.

Situación en Galicia. En concreto, la comunidad gallega, enmarcada en la costa norte, también presenta muy buenos datos en el ámbito de la compraventa de viviendas, ya sean primeras o segundas residencias. Además, muestra un aumento de demanda por hacerse con un domicilio en las costas gallegas.

Si atendemos a Pontevedra, presenta el precio medio por vivienda más alto de toda Galicia, con 1.241 euros por metro cuadrado. Además, la zona de A Guarda a Baiona, registra la mayor variación anual en el coste de la vivienda con un 42,1 %.

En cuanto al peso en el mercado, las viviendas costeras de la provincia pontevedresa suponen el 75 % de las compraventas, lo que indica la gran demanda que despierta esta zona gallega.

A Coruña, por su parte, es la provincia costera gallega que más operaciones de compraventa realizó. Según el informe, se llevaron a cabo 7.681 transacciones. Además, el valor medio de la vivienda general en los municipios de A Coruña es de 995 euros por metro cuadrado. Este precio se incrementa si se trata de una vivienda de tipología familiar sobre si es unifamiliar. En el primero, se llega a los 2.000 euros por metro cuadrado, mientras que en el segundo se queda en los 1.600 euros.

En cuanto a la demanda, ésta también experimentó un subida pronunciada, pero la actividad promotora es inferior a la del 2019. Además, el informe muestra que los interesados suelen ser de España.

Por último, Lugo es la provincia de Galicia con menos costa. Allí, el precio de las segundas residencias se sitúa entre un 40 % y un 60 % por encima de la primera residencia. Además, el valor medio de las viviendas en los municipios costeros de Lugo es de 934 €/m2, siendo el más bajo de la comunidad.

Debido a su escasa línea de costa, las localidades de la costa lucense presentan un peso limitado en el mercado inmobiliario, ya que apenas suponen un 32 % de las compraventas que se llevan a cabo.

La demanda, por su parte, también experimentó un crecimiento notable, ya que el precio medio de los municipios costeros aumentó un 6,4 % interanual. Asimismo, la mayoría de los demandantes de domicilios en Lugo provienen de Madrid Asturias, Castilla y León e incluso de Galicia –proceden, mayormente, de Ourense y de Lugo–.

En clave nacional. Respecto al ámbito español, la costa mediterránea es la zona, de acuerdo con el dossier de Tinsa, donde se realizaron la mayor cantidad de operaciones de compraventa, con un total de 166.868, superando ampliamente los datos del 2019. En segunda posición, se situan las islas, tanto las Canarias como las Baleares.

Si atendemos a la actividad promotora y a las licencias concedidas en 2021, Málaga y Alicante se situarán a la cabeza como los territorios con más obras nuevas, teniendo 6.000 y 3.600 visados, respectivamente. En cambio, si nos fijamos en la promoción, Las Palmas, Baleares y Málaga son los mercados costeros con más peso sobre el total de la provincia. En el caso de las islas, su geografía supone una reducida existencia de mercados exteriores.

Además, el precio medio más alto de una localidad se produce en Ibiza, con un valor medio de 3.286 €/m2. Contra todo pronóstico, el segundo clasificado sería la zona entre San Sebastián y Hondarribia, con un precio de 2.906€/m2. Un dato muy sorprendente puesto que la zona norte del país se suele catalogar como la que tiene peor clima, factor importante para vivir en la costa.

Sin embargo, este informe sirve para romper clichés y sorprender a propios y extraños con los lugares donde se vive o se veranea.