Santiago
+15° C
Actualizado
martes, 23 abril 2024
16:11
h

Los gallegos, más escépticos sobre energías verdes y la biodiversidad

Un informe de Engie y GAD3 sostiene que, en cambio, lideran a los que rechazan el carbón

    El 85 % de los españoles ve compatible el desarrollo de las energías renovables con la protección de la biodiversidad. Los españoles consideran que las energías renovables representan una de las alternativas más positivas, ya que favorecen a España en los planos medioambiental y económico. No obstante, solo el 64% de los gallegos afirman que las energías verdes son favorables para el cambio climáticos, posicionando a esta comunidad autónoma como la más escéptica ante estas fuentes de energía. Así lo revela el estudio ‘Los españoles, las energías renovables y la biodiversidad’, promovido por Engie España, realizado por GAD3 y presentado el lunes, tras la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente.

    El informe revela que la comunidad gallega es la más escéptica a la hora de afirmar que las energías renovables favorecen la lucha contra el cambio climático. En cambio, de todas las comunidades que consideran el carbón como una fuente de energía con impacto negativo en la biodiversidad, Galicia se sitúa a la cabeza.

    Los españoles avanzan en la concienciación sobre la necesaria protección de la biodiversidad: el 81% se siente “preocupado” o “muy preocupado”. Tras la pandemia, el 66 % de los encuestados considera “alarmante” el aumento de enfermedades, plagas y epidemias. Siete de cada diez españoles muestran interés por el posible aumento de los fenómenos climatológicos y la desaparición de recursos naturales como consecuencia derivada de la pérdida de biodiversidad. El 90 % es partidario de la solar.

    Existe un alto grado de inquietud entre los españoles por la biodiversidad, especialmente entre las personas de mediana edad (35 - 64 años). Asimismo, entre las consecuencias que más preocupan a la población de la pérdida de la biodiversidad destaca, en primer lugar, un posible aumento de los fenómenos climatológicos (74 %), seguido de la desaparición de recursos naturales (71 %).

    Uno de los datos más llamativos es que, en tercer lugar (66 %), los españoles temen el posible aumento de enfermedades, plagas y epidemias en un contexto marcado por las consecuencias de la pandemia. En plena transición energética, la mayoría de la sociedad española percibe las energías renovables como fuente “buena” o “muy buena”, afirmaciones respaldadas, en mayor medida, por hombres (89 %) que por mujeres (81 %). Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Baleares y Canarias son las comunidades más partidarias de las energías verdes.

    Estas percepciones positivas de las energías renovables están curiosamente relacionadas con la edad, ya que el 73 % de los encuestados que las consideran favorables tiene más de 65 años, el 69 % tiene un rango de edad entre 45 y 64 años, el 64 % tiene entre 35 y 44 años y finalmente, un 63 % representa a la población más joven. Paralelamente, los españoles (dos tercios) son capaces de identificar el camino correcto para luchar contra el cambio climático: las energías renovables. A pesar de que más de la mitad de los gallegos confirman que las energías renovables favorecen la lucha contra el cambio climático, es la comunidad autónoma que menos las apoya (64 %).

    Entre los temas que mayor interés despiertan entre la sociedad, destaca la biodiversidad: un 81 % de los españoles se muestra muy preocupado por su protección y un porcentaje aún mayor (85 %) ve compatible el desarrollo de las energías renovables como una solución para mejorar y proteger la biodiversidad. Estas consideraciones están en sintonía con el posicionamiento estratégico de Engie.

    El informe también destaca que, según los españoles, las energías renovables producen impactos positivos que afectan al medioambiente y a la economía. La gran mayoría de los entrevistados (ocho de cada diez) apuesta por las energías renovables como herramienta para reducir las emisiones a la atmósfera y la lucha contra el cambio climático.

    Los españoles muestran su preferencia por la energía solar en términos de soluciones energéticas sostenibles, ya que un 90 % la califican como “buena” o “muy buena”; en segundo lugar, está la energía eólica (82 %), y a continuación el hidrógeno verde (60 %). La imagen más positiva de la energía solar se percibe en Cataluña (93 %), seguida de Andalucía (92 %) y de las regiones del norte de España (92 %). Galicia está en cuarto lugar con el 91 % de los encuestados. Las comunidades del norte y del sur son las que más critican el impacto paisajístico de las energías renovables. Además, los biocombustibles son los que menor puntuación reciben.

    Tratando los aspectos más negativos y perjudiciales para medio ambiente, existe un alto rechazo al carbón (64 %), así como a la energía nuclear (48 %) y al gas natural (34 %). A diferencia del resto de comunidades, en Cataluña la nuclear es considerada perjudicial por la mayoría de la población.

    El pódium para la fuente de energía más alejada de la lucha por la biodiversidad se lo lleva el petróleo, ya que el 85 % de la sociedad considera que afecta negativamente, coincidiendo en todas las regiones con unos porcentajes muy similares (85 % en Galicia). La medalla de plata es para el carbón con un 78 % y el bronce es para las energías nucleares con el 68 %. De todas las votaciones dirigidas al carbón, el porcentaje más alto proviene de Galicia (83 %).

    En relación al modelo de producción energético, casi la mitad de los madrileños prefiere un modelo mayoritariamente centralizado. Cabe destacar que los gallegos, a pesar de considerar este modelo como la opción menos favorable en la actualidad (35 %), sostienen que en el plazo de diez años se acercará al modelo más conveniente.

    Reparto de responsabilidades

    El 64 % de los encuestados no es capaz de reconocer quién es la persona, entidad u organismo encargado de velar por la protección de la biodiversidad. No obstante, la mayoría (siete de cada diez españoles) y especialmente, las comunidades del norte de España (83 %), entienden que el principal responsable es la Administración Central. En Galicia lo comparte más del 77 % de la población. La Administración Local ocupa el segundo lugar (seis de cada diez) y, en menor medida, pero también de forma mayoritaria (cinco de cada diez), de las empresas. Para el 45 % de la población, una gran responsabilidad recae sobre los propios ciudadanos, sin olvidar a los agricultores, ganaderos y Organizaciones No Gubernamentales ambientales, respaldados por tres de cada diez españoles.

    De igual forma, el norte de España es la única zona donde no hay una mayoría que apueste por que las empresas energéticas implementen planes de protección de la biodiversidad más restrictivos que la normativa vigente.

    El análisis de estos datos pone de manifiesto una creciente inquietud sobre las problemáticas globales que en la actualidad afronta el planeta: la pérdida de biodiversidad y la batalla contra el cambio climático, dos retos que están en el centro de la conversación social.

    Loreno Ordoñez, CEO de Engie España comparte su visión: “Con esta encuesta, Engie España busca promocionar el conocimiento respecto a los ámbitos de la sostenibilidad, el cambio climático y la transición energética. Hemos querido escuchar y dar la palabra a los ciudadanos sobre uno de los desafíos de mayor relevancia en la actualidad: la emergencia climática. En Engie España nos comprometemos a trabajar para hacer frente a estos retos y hemos situado la descarbonización y preservación de la naturaleza en el corazón de nuestro negocio”.

    07 jun 2022 / 00:00
    • Ver comentarios
    Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
    Tema marcado como favorito