Rodríguez carga contra el “caos y la improvisación” del Ministerio de Educación

“Catorce meses y dos ministras después, seguimos a la espera de conocer los currículos educativos que deberán regir a partir del próximo mes de septiembre”. El conselleiro de Educación, Román Rodríguez, lamentó este miércoles en el Parlamento el retraso en los plazos que el Ministerio de Educación se autoimpuso para publicar los documentos que establecen las enseñanzas y los contenidos temáticos que se deben trasladar a los alumnos a lo largo de cada curso adaptados a la Lomloe. No fue éste el único punto de crítica a la gestión del Ministerio. En respuesta a preguntas del PP en el Pleno de la Cámara, Rodríguez censuró también el cambio en las reglas “a mitad de partido” que el Ministerio introduce en las oposiciones, aunque en este caso, dijo, la Xunta ha reaccionado a tiempo. “El desarrollo de la Lomloe es una sucesión constante de caos, improvisación, incertidumbre y pequeños desastres, una desastroso ejemplo de lo que no se debe hacer”, dijo Rodríguez en el Pleno.

Su primera embestida fue a propósito de los currículos. El conselleiro pidió celeridad en el contenido de los de Primaria, Secundaria y Bachillerato ya que, advirtió, “el tiempo corre y el próximo curso está cada vez más cerca y, de no actuar con más agilidad podemos llegar tarde”. Recordó, en este punto, que la propia ministra Pilar Alegría se comprometió a publicar a finales de año los currículos de Infantil y Primaria, y por ahora solo ha cumplido con el primero.

El titular de Educación en la Xunta no escondió su “preocupación” por las demoras y alertó, en este sentido, de las “dificultades” que van a tener las comunidades autónomas para contar con los contenidos antes del inicio del curso, pues son ellas las encargadas de desarrollar aproximadamente el 50 % de los curriculos estatales.

Aunque para evitar problemas mayores, Galicia tiene ya parte del trabajo hecho. La Consellería, según recordó Rodríguez González, constituyó en septiembre grupos de trabajo con profesorado especialista para ir perfilando los contenidos de la parte autonómica, aunque éstos no se pueden cerrar hasta que se conozcan los textos definitivos que se publiquen en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

En la segunda embestida, puesta en bandeja por una pregunta del popular Ovidio Rodeiro, el conselleiro criticó que Ministerio pretenda cambiar justo ahora el sistema de oposiciones perjudicando a “cientos de miles” de opositores que están actualmente preparando los exámenes. Para evitar este daño y garantizar la “igualdad y la equidad”, y también dar “seguridad jurídica” al proceso, la Xunta celebrará a mediados de año la oposiciones para cubrir 2628 plazas distribuidas en 61 especialidades, y de las cuales el 87 % son de nuevo ingreso. A mayores en el último trimestre del año se va a celebrar un concurso de méritos para interinos –adaptado ya al real decreto que prepara el Ministerio– y con el que la oferta final de plazas en la comunidad superará las 3.000.

Los cambios anunciados por el Ministerio tienen por objetivo bajar la interinidad del profesorado al 8 %. Pero Galicia, según recordó Román Rodríguez, ya registra esa cifra, frente el 25 % de la media estatal o el 40 % que alcanzan algunas comunidades autónomas. El conselleiro destacó el “esfuerzo” del Gobierno autonómico por estabilizar al profesorado de la educación pública, con unas cifras –dijo– que superan los 15.000 dcentes empleados públicos en los últimos 14 años.