Tres detenidos como presuntos autores de la agresión a Samuel

La Policía Nacional detuvo ayer por la tarde a dos hombres y una mujer, de entre 20 y 25 años, españoles y vecinos de A Coruña, como presuntos autores de la agresión que acabó con la vida de Samuel. La investigación continúa abierta y, según fuentes policiales, con toda probabilidad habrá más detenciones en las próximas horas. Dos de ellos fueron los que iniciaron la agresión y después se sumó un tercero al que se identificó como uno de los que patearon en el suelo al joven. Todos pertenecían al mismo grupo y, según su testimonio inicial, no conocían al fallecido. La mala calidad de las cámaras está dificultando la identificación de los participantes.

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia no pudieron precisar todavía cuándo van a pasar a disposición judicial los tres detenidos.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha confirmado la detención de estos tres jóvenes, residentes en A Coruña, pero no ha querido precisar si los investigadores trabajan con alguna hipótesis concreta sobre el móvil de la agresión y se ha limitado a pedir a los medios de comunicación que dejen “trabajar con sosiego” a la Policía, que está realizando un labor “relevante”.

Todos los elementos “incriminatorios” se están analizando, así como otros que pueden determinar lo sucedido, ha continuado el ministro antes de insistir en la necesidad de dejar a la Policía que siga trabajando en el caso “de forma profusa” como lo está haciendo. La operación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones, ha resaltado el titular de Interior, que ha recordado que la Policía, junto con la Fiscalía y el Juzgado analizan todas las circunstancias que han podido concurrir en este asesinato.

Hasta este lunes, un total de quince personas prestaron declaración por diversas pruebas testificales en relación con el crimen, según informó el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, quien no concretó si entre las quince personas que pasaron a testificar se encuentra alguno de los posibles autores de la agresión mortal, cuyo caso se encuentra bajo el secreto de sumario decretado por el juzgado. Con todo, pidió a la gente “que sepa o que pueda algún dato fiable, que lo haga”.

Además, Miñones hizo un llamamiento a dejar que la investigación siga su curso, porque “las próximas horas son cruciales”. En cualquier caso, explicó que serán tanto los testigos como las imágenes captadas por las cámaras –de la Policía Local y de las entidades privadas– en el lugar de los hechos, las que “van a permitir esclarecer el detalle de lo ocurrido”.

“Sobre la posible motivación homófoba del crimen, que generó una gran oleada de protestas a lo largo de la jornada del lunes por toda España, insistió en que “lo importante es que la investigación se cierre bien”, ya que será esta la que “va a esclarecer mejor los hechos”.

Por el momento, no se descarta ninguna hipótesis y en esa línea seguirá la Policía Nacional. Sin embargo, los primeros resultados de las investigaciones apuntan a que la muerte del joven coruñés no fue una agresión homófoba.

La calidad de las imágenes grabadas por las cámaras próximas al lugar de los hechos dificulta la identificación del autor. De esta manera, en las pesquisas que se llevaron a cabo hasta ahora no aparecen indicios de delito de odio.

Un móvil que, en principio, no parece cobrar peso porque todo sucedió cuando Samuel y una amiga estaban realizando una videollamada con el teléfono móvil con otra joven, lo que desencadenó la pelea porque un grupo de jóvenes creyó que les estaban grabando.

Precisamente, este el primero motivo por el que los investigadores no hablan en su primer atestado de delito de odio.

Otra de las razones que podrían descartar la agresión homófoba es que el grupo que dio la paliza a Samuel no le conocía de nada ni podía saber su orientación sexual.

Y es que además del grito de “maricón”, los agresores profirieron otros insultos, como “subnormal” o “hijo de puta”, según resaltan las fuentes consultadas.

Tras las tres primeras detenciones, el delegado del Gobierno en Galicia ha aprovechado para agradecer el “trabajo riguroso” realizado en las últimas jornadas por la Policía Judicial, ya que “desde el primer momento” trabajaron “con el único fin de llevar ante la justicia a los autores” de este crimen. Así, Miñones ha vuelto a apelar a “la responsabilidad y a la prudencia” para dejar trabajar a los agentes en la resolución de este caso: “Se lo debemos a nuestra sociedad y se lo debemos sobre todo a la familia de Samuel”.