Cabo de Fisterra, balcón sobre el fin del mundo
A Coruña
Para los romanos este era el punto más occidental de la Tierra, donde acababa el mundo, el Finis Terrae. Por ello, desde siempre ha actuado como polo de atracción para el ser humano. Y a ello no es ajeno que cabo Fisterra esconde el verdadero secreto de la Costa da Morte: paisajes agrestes y unas impresionantes playas, unas de aguas tranquilas y otras de fuerte oleaje, como Mar de Fóra, una de las más salvajes de Galicia. Fisterra es ahora uno de los dos puntos finales de multitud de peregrinos que llegan aCompostela por el Camino y que deciden completar su recorrido para admirar ese imaginario fin del mundo. Dice la tradición que los caminantes quemaban sus botas sobre los acantilados ante la mirada inquietantedel oleaje del océano Atlántico.