Misa del Gallo y de Navidad en la iglesia de San Francisco por las obras en la Catedral

FELICITACIÓN DEL ARZOBISPO Por las obras en el interior de la Catedral, la iglesia de San Francisco fue el escenario de la celebración de la Misa del Gallo de Nochebuena y la eucaristía estacional de la Natividad del Señor, ambas presididas por el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, quien, en su tradicional felicitación navideña, destacó que "es el tiempo de la alegría, de la esperanza cumplida, del sueño de Dios realizado. Es el tiempo del asombro agradecido, es la hora de la gloria divina, del amor y de la paz". Y añadió: "Es el momento de velar y no dormir. Es el instante preciso para adorar y dejarse iluminar por la luz inmensa que aparece para nosotros, para ti y para mí, que éramos pueblo que caminaba en tinieblas". Además, el arzobispo señaló que "el papa Francisco nos recuerda que la ternura y el desvivirse por el hermano son como el amor que se hace cercano y concreto. Es un movimiento que procede del corazón y llega a los ojos, a los oídos, a las manos". "La ternura", indicó, "es usar los ojos para ver al otro, usar los oídos para escuchar al otro, para oír el grito de los pequeños, de los pobres, de los que temen el futuro".