Nuevo jefe de Bomberos: un arquitecto de tan solo 37 años

Los bomberos de Santiago estrenan nuevo jefe después de que hace poco menos de un año se jubilara Jesús Martínez. Así, desde el pasado 1 de noviembre el encargado de llevar las riendas del Cuerpo es Manuel Sanmartín Chao, un arquitecto de 37 años que vive en Compostela su primera experiencia en un parque de Bomberos. Trabajaba, desde 2015, en la Xunta.

Cabe señalar que para dirigir el cuerpo de extinción de incendios es necesario contar con un título de arquitecto o ingeniero, algo que muchos desconocen. El propio Manuel Sanmartín, en conversaciones con EL CORREO GALLEGO, explica que el motivo de este requisito está relacionado con la afección estructural. "Ante una catástrofe que pueda haber alguien tiene que evaluar si esa estructura es válida para desalojar y decidir cuáles son las decisiones que se deben tomar. Además, se supone que tanto un arquitecto, como yo, como un ingeniero debe conocer la normativa antiincendios. No obstante, el jefe de Bomberos no participa en las intervenciones que realiza el Cuerpo, y en todos los turnos hay un jefe que necesariamente tiene que ser bombero", explica.

Manuel Sanmartín asegura que a su llegada al parque se encontró con que los bomberos demandaban la presencia de una figura que "coordinase" el servicio. "Ellos trabajan a turnos y no coinciden, así que necesitaban un punto de referencia que coordinara la situación", explica antes de confesar que no llegó a conocer al anterior jefe de Bomberos. "Encontré muchos papeles que tenía él por allí, pero no llegué ni a hablar con él".

Uno de los principales retos que deberá asumir Manuel Sanmartín en su nuevo puesto será la polémica del parque comarcal. De hecho, Jesús Martínez llegó a admitir en su última entrevista como jefe de Bomberos -concedida al programa Compostela en la Onda- que se iba con una pequeña espina clavada por no haber conseguido que esta instalación estuviese ubicada ya en Santiago. Sobre este tema, Sanmartín Chao reconoce que la comarcalización se debe hacer, pero siempre negociando y contando con los demás. "Hay que dotarse de personal y de medios; y hay algo que hacer con diálogo".

En lo tocante a los objetivos que se ha marcado como nuevo jefe de Bomberos, señala que es necesario realizar un trabajo de mejora y modernización del parque. "Mi objetivo es implantar nuevas tecnologías, aplicaciones de gestión y modernizar el material". Sobre este aspecto, reconoce que hay una inversión "importante" que realizar en el parque porque está un poco desfasado. "En el campo de la seguridad la renovación es constante". Con todo, hay materiales, como una autoescala -actualmente los efectivos utilizan una del año 1982- que están muy obsoletos. "Estoy trabajando en ello desde que llegué, pero los procesos de contratación son complicados. Además, la autoescala necesita un periodo de fabricación de 12 meses", sostiene.

Plantilla. Del mismo modo que ocurre con otros cuerpos, como el de la Policía Local, el de Bomberos de la capital gallega también sufre un grave problema de falta de personal. La última oposición se convocó en 2006 y por aquel entonces la plantilla estaba compuesta por 72 efectivos. Actualmente, aunque se acaban de convocar siete nuevas plazas, solo hay 42 bomberos trabajando. Sanmartín reconoce que están "bajo mínimos". "La situación está limitada a la contratación de empleados públicos, pero de alguna forma hay que poner solución a esto porque el tiempo pasa y la gente se va jubilando".

El parque de Bomberos nunca ha contado con una mujer en la plantilla y a la pregunta de cuándo habrá una, el nuevo jefe señala que espera que sea pronto, pero que todo depende de los resultados de las pruebas. "No tengo ningún problema con que haya una mujer en el Cuerpo. Siempre y cuando supere el proceso selectivo, será bienvenida".

Al margen de las intervenciones básicas que todos relacionamos con los Bomberos, como la extinción de incendios o el rescate de personas, los efectivos de Santiago centran gran parte de su trabajo en las velutinas. "La mayoría de nuestras salidas están relacionadas con el control de estas avispas. Recibimos avisos todos los días, incluso ahora que estamos en temporada baja. Sin embargo, para acabar con esta plaga es necesario la coordinación entre diferentes administraciones porque no va a servir de nada que trabajemos solo en el término municipal de Santiago".

Otra parte importante de su trabajo se centra en la prevención, ya sea realizando simulacros o con charlas en los colegios. "La formación es básica, que la gente sepa cómo actuar nos facilita mucho el trabajo", concluye.