"Nos saltamos el protocolo al encender el pebetero"

Esther Pedrosa forma parte del escueto grupo de deportistas que pueden afirmar que tuvieron en su mano la legendaria llama olímpica. En su caso, la oportunidad le llegó en el año 1992, cuando se posicionaba como una de las favoritas para integrar el equipo español de atletismo. De aquel día recuerda con especial cariño la gran cantidad de vecinos que salieron a la calle para disfrutar de aquel momento histórico que, seguro, tardará en repetirse. La concelleira cuenta como anécdota lo ocurrido al llegar a la meta. “En teoría solo puede encender el pebetero un deportista internacional, aunque en mi caso me ayudó Xerardo Estévez, que era alcalde en aquel momento. Nos saltamos el protocolo”, explica.