La SD rescata el empate con diez pero cede "colchón" en Abegondo

No fue posible la sexta victoria consecutiva del líder Compostela ni mantener la renta de cuatro puntos sobre el Ourense CF, pero el empate matinal obtenido contra el Fabril a domicilio dejó buen sabor de boca. El Compostela, dos veces por detrás en el marcador de Abegondo, mostró ambición, carácter y personalidad para rescatar un punto con un futbolista menos desde el minuto 73 por expulsión del exfabrilista Bicho, que, un cuarto de hora antes de recibir la segunda tarjeta amarilla, la cual llegó un minuto después de la primera, se había estrenado como goleador de la SD.

La actuación del colegiado vigués Extremadura Hernández no dejó satisfecho a nadie. Todas las amonestaciones visitantes se concentraron a partir de la doble amarilla a Bicho.

El Compostela tuvo el dominio mucho más tiempo, pero por ocasiones el resultado fue justo. Un cabezazo de Primo a las manos del juvenil Alberto, la gran sorpresa de la alineación de Luisito, abrió el denso repertorio de ocasiones. Javi Sánchez y Losada replicaron poco después, como preludio del primer tanto: Losada cabeceó un centro de Javi Sánchez desde el perfil izquierdo y el balón se coló ante la mirada de un Pato literalmente clavado sobre el césped.

A los tres minutos de ello, Hugo acarició el empate con un tiro casi sin ángulo. El dominio del Compostela fue in crescendo aunque sin la profundidad necesaria. El Fabril, lastrado por tres derrotas seguidas, se sintió bastante cómodo por detrás del balón, algo similar al Deportivo de Fernando Vázquez, espectador de lujo del encuentro. Bicho probó fortuna y despejó Alberto como última incidencia del período inicial.

La segunda parte la picó Bicho con una cosa buena, el golazo del empate, y otra mala, la expulsión. En el 57, controló fuera del área un despeje de Alberto y voleó a la red con la izquierda entre un mar de piernas: 1-1.

HÉROE Y VILLANO. El éxtasis compostelanista casi lo completó Miki de disparo cruzado cerca de la madera en el 61. A renglón seguido, Losada hizo lucirse a Pato. El intercambio de misivas lo continuó el local Juan Rodríguez cabeceando por fuera. Y Bicho pasó de héroe a villano por recibir dos tarjetas amarillas en un minuto, la primera por una falta normal y la segunda por un manotazo a Villares.

Eso sí, el revulsivo Abelenda puso la chispa necesaria, primero en un tiro repelido por Alberto. En el 86, un barullo tras un córner sonrió al revulsivo Iago Parga para dar una nueva ventaja al Fabril, aparentemente definitiva, pero un minuto después, Primo combinó con Abelenda y estableció por bajo, desde dentro del área, el 2-2 final. En la última jugada, fair-play: el Fabril no lanzó un libre indirecto por no sacar Pato con Sergio Pereira en el suelo: era injusto.