...Cuando una tremenda nevada en 1987 causó el caos en las carreteras compostelanas

En el año 1987 una tremenda nevada sacudió Santiago, invitando a todos los compostelanos a salir a la calle para disfrutar de aquella bellísima estampa. Sin embargo, pese a la felicidad inicial por ver la ciudad cubierta de blanco, el hielo hizo mella en las carreteras que durante aquel día se convirtieron en un auténtico caos. "En una ciudad como Santiago, en la que ver nevadas como esta no eran algo habitual, la gente no estaba preparada para conducir en esas condiciones. Nadie llevaba cadenas", recuerda Cesáreo Rey, exjefe de bomberos de Santiago que aquel día tuvo "mucho trabajo". Finalmente no hubo que lamentar grandes accidentes, aunque sí que hubo algunas incidencias que, seguro, sirvieron para que muchos salieran más preparados en su siguiente experiencia en carreteras heladas.

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