Santiago
+15° C
Actualizado
lunes, 03 junio 2024
15:30
h

Los verdaderos incunables gallegos

La imprenta llegó a la comunidad treinta y cinco años más tarde de ser inventada por Gutenberg

Una obra impresa anterior a 1.501. Esa es la definición por la que se inclinan en la actualidad los estudiosos para designar escuetamente a un incunable. El límite, sin embargo, no es rígido debido principalmente a la dificultad para fechar los escritos. El término incunable procede del latín incunabula, las telas en las que se envolvía a los bebés y, en sentido figurado, el lugar de nacimiento y de procedencia. Quizás el rasgo más característico que separa a un incunable de una obra posterior es el influjo que ejerce sobre el primero el modelo del manuscrito.

Tanto Gutenberg como sus coetáneos mostraron una especial preocupación por respetar la escritura a mano en cada detalle partiendo de determinados tipos de letras. Asimismo respetaban las ligaduras, las abreviaturas y todas aquellas particularidades propias de la época e intentaban reproducir mecánicamente elementos no textuales como ilustraciones o notas musicales. En su Biblia de 42 líneas, Gutenberg imitaba la escritura alemana; el modelo italiano, al sur, se basaba en las inscripciones humanistas: mayúsculas romanas y minúsculas carolingias. Un hecho fundamental para orientar a los especialistas lo constituye justamente el que sólo en un texto tipográfico se puede alcanzar la igualdad absoluta entre los diferentes caracteres.

A los impresos más antiguos les faltaba  el colofón y la portada. También eran escasos los impresores o editores que firmaban sus obras. Las tiradas eran, por lo general, bastante reducidas, y el mayor cliente, por no decir el único, lo constituía la Iglesia. En Galicia, no resulta extraño, pues, que los primeros núcleos de producción fuesen Ourense, Monterrei y Mondoñedo, en cuyo seminario se pueden admirar un centenar de incunables entre los que se encuentra el famoso Confesional de Mondoñedo, a los que se les sumaría posteriormente Santiago de Compostela, la única ciudad gallega que mantuvo talleres tipográficos con continuidad hasta el s. XIX.

La primera imprenta llegó a la comunidad unos treinta y cinco años después de su invención en Alemania. Los impresores procedían del Reino de Castilla o bien eran extranjeros que realizaban por encargo breviarios, pequeños libros de oración que se distribuían entre las parroquias del arzobispado, o manuales en los que se recogían los ritos de administración de los sacramentos.

La mayor parte de los expertos consideran como la primera obra impresa en Galicia el Breviario auriense, conservado íntegro en la Catedral de Ourense. Hay que matizar, sin embargo, que todavía hoy en día constituye una incógnita por la singularidad de su tipografía y que se cree que vio la luz entre 1485 y 1490. Posterior, de 1494, sería ya el Misal auriense, impreso en Monterrei, complejo militar y residencia en los dominios del Conde de Lemos donde se desarrolló una actividad de relevante envergadura para aquellos tiempos. Algunos investigadores atribuyen asimismo al taller de Monterrei el Misal compostelano de 1945, extremo que también genera controversias.

Precisamente, hace unos años ha sido recuperado gracias a la labor del canónigo archivero de la Catedral compostelana, José María Díaz, y al estudioso Ignacio Cabana un importante fragmento del mismo, calificado de excepcional por su calidad artística y la información que proporciona acerca de la vida real y de la Iglesia con anterioridad al Concilio de Trento (1542), cuando fue reemplazado por el misal de Pío V, lo que condujo a su desaparición. Cabano, que cifra la edición en 720 ejemplares en papel y otros treinta en pergaminos, se inclina por la tesis de que procede de Monterrei y lo habría realizado la escuela de Juan Portas por encargo del arzobispo Alonso II de Fonseca.

El Misal está formado por cuatro hojas en pergamino impreso a dos columnas de treinta y dos líneas y que podría ser incluso anterior al que se guarda en Ourense por su mayor rusticidad y sus páginas sin numerar.

19 ago 2011 / 19:59
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
Tema marcado como favorito