Blindan la seguridad entre Burés y Araño con una senda de 1,3 km

Nadie mejor que Rosario Fernández puede explicar lo peligroso que resulta caminar por la carretera comarcal AC-305, entre Burés y Araño, en Rianxo; una zona que carece de aceras e incluso de arcén y por la que los vehículos suelen circular a gran velocidad. Rosario es madre de Vanesa, una chica con un 65 % de discapacidad que tiene que ir caminando a diario por esa calzada para coger el autobús de la asociación Ambar. Además, sus problemas de audición le impiden oír los vehículos cuando se aproximan, por lo que su riesgo es aún mayor... y suele asustarse cuando pasan a su lado.

Hace poco más de tres años (el 20 de febrero de 2019) Rosario denunciaba a pie de carretera esta situación y reivindicaba la construcción de aceras. Y, aunque más tarde de lo deseado, su petición, que es la de todos los vecinos de Burés y de Asados, ha tenido respuesta. La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, tuvo la deferencia de llamar a Rosario este martes para informarla de los detalles del proyecto para construir la senda peatonal A Casilla-Araño-Burés unas horas antes de presentarlo junto al alcalde de Rianxo, Adolfo Muíños, y anunciar la licitación de las obras.

La actuación cuenta con una inversión de 505.474 euros. La conselleira dijo que se iniciará en septiembre y que tendrá un plazo de ejecución de seis meses, por lo que estará lista en la primavera de 2023. Los actos expropiatorios están ya convocados, en concreto, para finales de este mes: el día 29 será el levantamiento de actas previas y el 18 julio se firmarán los actas de ocupación. Las empresas ya pueden presentar sus ofertas hasta el nueve de mayo.

Los nuevos itinerarios peatonales se ejecutarán por el margen derecho de la carretera, habilitando en total más de 1,3 kilómetros de senda. Tomando como referencia la línea del borde actual de la vía, se ampliará o se reducirá el arcén para igualarlo hasta 50 centímetros en toda la actuación. A partir de ahí, se ampliará la plataforma hasta alcanzar una senda de 2 metros de ancho.

La senda se construirá en dos tramos, para ofrecer continuidad a los desplazamientos peatonales. Así, el primero partirá del núcleo de Burés, a continuación de la acera actual, y finalizará en el lugar de Os Xens, donde conectará con la senda existente. Son, en total, unos 820 metros.

El segundo tramo, de 510 metros de longitud, comenzará en Contrés y finalizará en A Casilla, dando continuidad al itinerario actual. El firme será de hormigón armado, y se instalarán colectores para recoger y dirigir las aguas pluviales.

Los trabajos se completarán con la colocación de canalizaciones para las redes de telecomunicaciones, así como con taludes y desmontes como medida de regeneración ambiental. Además, se colocarán barandillas de protección de los peatones en distintas zonas y la señalización precisa en todo el itinerario.

Por otra parte, la conselleira anunció que, de forma complementaria, la Xunta de Galicia ejecutará una actuación adicional en el otro margen de esa misma carretera.

Ethel Vázquez añadió que esta actuación se suma a la que está en ejecución para mejorar el saneamiento y la depuración de las aguas residuales del municipio, con una inversión de 14 millones de euros.